Catherine Ettinger: presidenta del Patronato y la Junta de Gobierno del DIF

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Morelia, Mich.- El DIF es solidaridad, ha de ser el reflejo de una sociedad que quiere vivir con igualdad de oportunidades, en orden, y se ha de convertir en la bandera de un Michoacán que no se resigna a vivir sin dignidad, aseveró la presidenta del Sistema DIF estatal, Catherine Rose Ettinger Mc Enulty, al tomar protesta como presidenta del Patronato y la Junta de Gobierno de la misma institución, momento en el que estuvo acompañada por su esposo, el gobernador del estado, Salvador Jara Guerrero.

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Rodeada de los miembros del Patronato y Junta de Gobierno, conformada por funcionarios estatales e integrantes de la sociedad civil, la presidenta honoraria del Patronato destacó que el DIF “es la fuerza de nuestros sentimientos que debe traducirse en hechos y es así que en la suma de todas las necesidades, la palabra más, se convierte en la acción de sumar, hay que sumarnos para trabajar por esta institución con energía y vehemencia ante las enormes necesidades de las y los michoacanos más vulnerables”.

Explicó que se tiene el gran desafío de definir cómo hacer más eficaz la tarea gubernamental para optimizar, potencializar e invertir los recursos económicos mediante su mejor aplicación y con la capacitación de quienes se benefician de los recursos materiales.

“La tarea que se lleva a cabo en el DIF tiene que ir acorde a la reconciliación de Michoacán que todos esperamos y deseamos”, labor que representa refrendar un trabajo en conjunto con la administración que encabeza el gobernador Salvador Jara y la sociedad, expresó.

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En las instalaciones del DIF estatal, agregó que es imprescindible vigilar la correcta aplicación de los recursos “porque las despensas lleguen a los necesitados, las terapias a quienes no pueden pagarlas”, indicó.

La meta propuesta, añadió, es conducir el patronato DIF Michoacán, dejar las palabras de lado y que los hechos hablen por sí solos, “el rumbo que hemos asumido en el DIF está relacionado con el fortalecimiento de la dignidad de las personas, de las familias michoacanas y, sobre todo, de los niños y jóvenes, quienes serán el motor de la verdadera transformación de este estado y quienes día a día nos empujan a crecer junto a ellos”.