Celebran a la Virgen de Dolores

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Cabe destacar que en este recinto federal, llevan 9 años montando este vistoso altar

Tsuri Chávez/ La Voz de Michoacán

 

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Morelia, Michoacán. Como parte de las costumbres de la ciudad y enmarcada en las celebraciones de la Semana Santa, este viernes 23 de marzo instalaron los altares a la Virgen de Dolores en distintos puntos de la ciudad.

En el Museo Regional de Morelia, el equipo del área de Comunicación Educativa montó un altar a la Virgen Dolorosa para promover esta tradición, así como dar a conocer información relevante sobre los diferentes elementos que componen la ofrenda.

Esta ofrenda durará en pie hasta el próximo viernes 1 de abril la cual podrán visitar tanto turistas como habitantes de la ciudad en las instalaciones del Museo Regional de Morelia, donde además los visitantes podrán degustar refrescante agua de sabores.

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Cabe destacar que en este recinto federal, llevan 9 años montando este vistoso altar, en el cual posicionan una figura de la Virgen de Dolores que data del siglo XVII.

La tradición de los altares para la Mater Dolorosa, resultó de la fusión y el sincretismo religioso de las creencias prehispánicas y el catolicismo llegado de los españoles. Su origen se remonta al siglo XVI y que fue instalada en México por los frailes Franciscanos.

Los elementos que lo componen incluyen semillas, un elemento prehispánico que  forma parte de la ofrenda, ya que durante esta temporada celebraran las cosechas y luego de la llegada de los españoles, eran parte de las ofrendas que los indígenas daban en forma simbólica a la Virgen Dolorosa.

Otros elementos incluyen las flores, veladoras, como forma de luz, fruta, banderillas y palomas blancas que simboliza el espíritu santo.

De acuerdo con la información brindada por los organizadores del montaje, esta ofrenda se realizaba en el sexto viernes de cuaresma anterior al Domingo de Ramos, con la finalidad de consolar a la Santísima Virgen, durante los ochos días después de la muerte de Jesús.

Los siete dolores de la virgen hacen referencia los 7 episodios de la vida de Jesús y que hicieron sufrir a María y en esta ocasión fueron representados por cuadros hechos de semillas para adornar el fondo del altar.