Héctor Jiménez/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Los ciudadanos que viven o transitan a diario por las colonias Lomas del Valle y Sentimientos de la Nación ya se han acostumbrado a los baches y el mal estado de las calles. Aunque en la zona se encuentra la avenida Siervo de la Nación, que es una de las vialidades más importantes de la ciudad, numerosas rutas presentan distintos niveles de afectación, que apenas comienzan a ser atendidas mediante acciones en la calle Loma del Rey. Aunque se ubican casi en el extremo de la zona poniente de la ciudad, las mencionadas colonias son dos de las más pobladas y transitadas de la mancha urbana de Morelia, pues en ellas están las oficinas centrales de la secretaria de educación en el estado (SEE), la sede de la cámara mexicana de la industria de la construcción (CMIC), la base de la ruta gris del servicio de transporte público en modalidad de combi, además de sucursales bancarias y docenas de establecimientos. Si bien la mayor afectación de las calles se observa en tramos laterales cubiertos por baches y hoyos, todas las vialidades de la zona, incluida Siervo de la Nación, muestran un agrietamiento general al que se le conoce como “cocodrileo” y que indica que dicha ruta no ha recibido el mantenimiento adecuado durante un extenso periodo de tiempo. “Mantenimiento no significa únicamente bachear, significa estar aplicando riegos de sello en las calles antes y después de las lluvias en las calles que han sufrido cuarteaduras, que tengan este problema que coloquialmente se le llama “cocodrileo”, son vialidades que tienen una serie de grietas, que pareciera que se convierte en piel de cocodrilo”, explicó con anterioridad el secretario de desarrollo metropolitano e infraestructura de Morelia, Sergio Adem Argueta. En tanto que los transportistas de la zona señalan que, si bien tienen ubicados los baches que hay en sus rutas e intentan evitarlos con movimientos del volante, prácticamente ya se han acostumbrado a hacer inversiones dos veces por año para arreglar los problemas que presentan sus vehículos a causa de las vialidades dañadas. Las unidades se nos amuelan seguido de la suspensión cuando truena uno llantas por los baches. Las reparaciones son de cada seis meses y estamos hablando de dos mil o tres mil pesos que tenemos que pagar”, señaló el operador de la ruta gris, José Ignacio Cortés. En relación a las obras de mantenimiento que se realizan en la calle Loma del Rey, el chofer de transporte público comentó que el cierre de esta vialidad genera problemas de tráfico en esta zona tan concurrida de la ciudad, a la par que otros tramos aledaños también requieren atención, tales como la calle Loma del Parque. Yo no vivo por estos rumbos, pero sí he visto muchos baches, son un montón. La principal está bien, pero sus calles alrededor sí están muy feas y no solamente aquí sino en todo Morelia. Nosotros llegamos en nuestro propio coche y la verdad ya no caemos en los baches, pero porque ya los conocemos”, explicó Mónica González, comerciante de la zona. En la colonia Lomas del Valle actualmente se llevan a cabo trabajos de mantenimiento por parte del ayuntamiento de Morelia sobre la calle Loma del Rey que, según información del municipio, presenta un avance del 20 por ciento, en tanto que ya se han realizado los trabajos de excavación y se procederá a la sustitución de la red hidráulica que presentaba más de 30 años de uso, para culminar con la aplicación de una nueva carpeta de asfalto. Precisamente la calle Loma del Rey se ramifica en una de las vialidades más afectadas de toda la colonia, Loma del Centro, en la que prácticamente el asfalto se ha convertido en piedras que ruedan por un camino donde casi no transitan autos y únicamente se usa como estacionamiento. En ese sentido, cabe recordar que el pasado 26 de noviembre el secretario Adem Argueta informó que el programa de bacheo de este año en Morelia tenía un avance del 70 por ciento, a la vez que hizo hincapié en que este proyecto contempla únicamente las vialidades principales, pues la atención integral de este problema tendría un costo aproximado de 2 mil millones de pesos, lo cual rebasa las actuales capacidades presupuestales del ayuntamiento de Morelia.