La Voz de Michoacán/Arturo Molina Morelia, Michoacán. Inician acercamientos con colonias irregulares de Michoacán para los procesos de regulación de asentamientos. Esta semana, la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial (Semaccdet) informó sobre estos planes, en los cuales se incluyó el diálogo con líderes de dichas colonias. En concreto fueron vecinos de los fraccionamientos Arroyo Colorado, Rubén Jaramillo, en Uruapan, y la colonia Leandro Valle, en Morelia, quienes se acercaron a la dependencia a que se le detallara el proceso de integración de expedientes y documentos que los podría encaminar a buscar la regularización de los asentamientos. Hasta el momento son sólo estas tres colonias irregulares las que han tenido acercamientos con el gobierno del estado de Michoacán y las dependencias encargadas; no obstante, la dependencia aclaró que se trata únicamente de acercamientos para la revisión de los requisitos para la regularización de predios. Mientras tanto, las cifras de colonias irregulares siguen en aumento, ya que en total existen en Michoacán al menos mil 600 asentamientos irregulares, muchos de ellos en las principales zonas urbanas del estado, como en el caso de Morelia y Uruapan. Hasta el año pasado se tenían en Morelia 300 asentamientos irregulares, de los cuales, se presume que muchos siguen creciendo. En Morelia son apenas 230 colonias irregulares las que podrían ser susceptibles a regularizarse. Uno de los conflictos es que al menos 100 asentamientos se encuentran asentados en terrenos de propiedad ejidal. Siguen siendo los liderazgos sociales los que han incidido en la invasión de tierras de propiedad privada, estatales e incluso federales, en la mayoría de los casos en total impunidad. No obstante, uno de los puntos que sigue preocupando a las autoridades michoacanas, es que, con el paso de los años, el riesgo civil por desastres naturales ha aumentado de manera exponencial ante los fenómenos naturales. No todos los asentamientos son susceptibles a regularizarse, pues en muchos asentamientos las condiciones de suelo, el riesgo e incluso el estatus legal de las tierras imposibilita a las autoridades a dotar de certeza legal a los colonos. Sólo en la ciudad de Morelia se estima que hay más de 100 asentamientos que no se podrían regularizar, derivado de la gran cantidad de riesgos a los que se enfrentan miles de familias. Administraciones pasadas han reconocido que los asentamientos irregulares han rebasado la capacidad de acción del Ayuntamiento por la gran cantidad de problemas que traen consigo. Los irregulares representan un total de 9 mil familias, las cuales en su mayoría se encuentran en zonas de alto riesgo por ser susceptibles a deslaves, inundaciones o fallas geológicas que afectan a las construcciones. A nivel estatal la cifra es mayor, según información de la Coordinación Estatal de Protección Civil, que indica que en Michoacán coexisten más de un millón de personas que residen en zonas de riesgo. A decir de los especialistas, el principal riesgo al que se enfrentan es que en su mayoría desconocen del peligro que les acecha prácticamente todos los días. Ha sido una tendencia en el estado que en ciudades como Morelia, Pátzcuaro y Uruapan han iniciado programas junto con dependencias federales para agilizar los programas de regularización de colonias, las cuales han surgido en su mayoría por la invasión de terrenos en diferentes estatus legales. El problema va más allá de los riesgos civiles, pues al instalarse en zonas de pendientes o de difícil acceso, el meter servicios resulta de mayor costo para las dependencias de abastecimiento de agua, servicios de electricidad, drenaje y urbanización de las calles. Recientemente la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) exhortó a los diferentess gobiernos a que tomen cartas en el asunto de la reubicación de los ciudadanos que residen en zonas de alta peligrosidad ante los sismos y las lluvias. Fue luego de desastres naturales del año pasado que el gobierno local exhortó a las autoridades a poner orden en esta situación. Autoridades municipales han reconocido que no todas las colonias irregulares de la capital son suceptibles a regularización; de las casi 300 que hay, sólo serían 237, mientras que hay, al menos 14 en zonas de alto riesgo. Hay colonias que han sido invadidas en el Quinceo, son predios propiedad del gobierno del estado y el Ayuntamietno no puede intervenir, señaló en su momento Roberto Reyes, secretario de Bienestar y Política Social, “ellos serán los responsables de la ubicación de esos predios que son propiedad de ellos. En Ciudad Jardín hay zonas invadidas que son de alto riesgo y estamos buscando ajustar y poder reubicar a las familias que viven en esta zona”. Entre los principales problemas se encuentra la falta de servicios básicos, como la falta de agua, misma que se les debe de proveer al menos mediante el uso de pipas por tratarse de un derecho humano.
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