Ariadna Báez/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán.-Desde temprana hora iniciaron los festejos por la Santa Cruz, o Día del Albañil, con una tradicional misa en la plaza Morelos. A lo largo de los años en México celebramos el Día de la Santa Cruz. El 3 de mayo se festeja el Día de la Santa Cruz, y se conoce más porque también se celebra a los trabajadores de la construcción, los albañiles, que acostumbran colocar una cruz bendita de madera adornada con flores y papel de china de colores en lo alto de la obra en construcción. Te presentamos tres versiones sobre el origen del Día de la Santa Cruz. Santa Elena de la Cruz Según crónicas antiguas, el 3 de mayo del año 292, Santa Elena encontró la cruz donde murió Cristo. La emperatriz Elena, esposa de Constancio Cloro, estaba obsesionada en encontrar la Cruz de Cristo, y por ello pidió a su esposo demoler el templo construido sobre el monte Calvario, pues estaba segura de encontrar la reliquia bajo el gran templo. Cruces de Constantino Esta versión refiere que el emperador Constantino marchaba a Roma con sus tropas para enfrentar a los bárbaros liderados por Majencio, cuyo ejército era muy superior; sabiendo que podía perder la batalla, pidió auxilio al dios de los cristianos y esa tarde tal y como cuenta la leyenda, en la puesta del sol, apareció en el cielo una cruz luminosa con la inscripción “In hoc signo vinces” (Con este signo vencerás); esa misma noche se le apareció Cristo en sueños mandándole que hiciera una bandera tomando como modelo la cruz que se le había aparecido y la portara en todas las batallas, así lo hizo, Majencio fue derrotado y en su huida se ahogó en el río Tíber; desde aquel día, como prenda de su victoria, Constantino mandó poner la cruz como remate de su corona. México Prehispánico En México, como parte del sincretismo entre las culturas española y prehispánica, los trabajadores de la construcción adoptaron la cruz para su celebración; esta tradición data de la época colonial, con la formación de los gremios, y según viejas crónicas. La celebración fue suprimida del calendario litúrgico por el Papa Juan XXIII, sin embargo los albañiles de México mantuvieron viva esta tradición; dado el fervor religioso, el Episcopado mexicano hizo las gestiones para que en México continuara vigente la celebración de la Santa Cruz.