Agencias/ La Voz de Michoacán. No, no está leyendo una crónica de hace 10 años pero por más que parezca imposible, Rodrigo ‘Pony’ Ruiz efectivamente fue el mayor dolor de cabeza de la defensa de Monarcas que terminó por permitirle dos anotaciones al 11 de Estudiantes. La primera, con un desvío incluido, pero la segunda, fue una jugada de crack por parte del veterano. Monarcas parece que ni siquiera terminó por resentir la salida de Rubén Omar Romano, ya que aunque tuvo mucha idea, la falencia del equipo es exactamente la misma: no la mete. Caso contrario vivió Estudiantes, que apenas en su primer llegada horadó la defensiva purépecha con un gol de Mejía que remató de cabeza correctamente. A partir de ahí, comenzó el show del recuerdo. Rodrigo Ruiz fue un avión por la banda izquierda, recortó jugadores, habilitó a sus compañeros en las jugadas de contragolpe que tenían y precisamente en una de esa, un mal rechace de Raúl Godínez terminó en su propia portería para el segundo festejo de Estudiantes. Monarcas logró reaccionar gracias a un zapatazo de Hiber Ruiz que venció de larga distancia a Rafael Ramírez, pero el intento de regreso por parte de Monarcas se quedó en el olvido cuando el ‘Pony’ rejuveneció 20 años, se quitó a dos hombres y ante la salida del portero definió como en sus mejores épocas, 3-1 y triunfo de Estudiantes que además se llevó la unidad extra de la serie. En otro marcador de la Copa MX, Atlante no tuvo piedad de Correcaminos y lo masacró 4-0 en el Andrés Quintana Roo en lo que parece ser el despertar de los Potros de Hierro que sumó dos juegos consecutivos sin conocer la derrota.