Redacción Web / La Voz de Michoacán. Morelia, Mich.- La Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas “Dr. Ignacio Chávez” de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) es un buen ejemplo de cómo se deben hacer las cosas de una manera correcta, así lo manifestó el rector Salvador Jara Guerrero durante el 184 aniversario de esta dependencia universitaria. En este sentido, recordó que hace siete años la facultad estuvo a punto de cerrar sus puertas; sin embargo no fue necesario por la solidaridad que mostraron los estudiantes, planta académica y administrativos de ese tiempo, logrando además, acreditar la facultad. “Hoy tenemos una comunidad más madura de estudiantes, profesores y administrativos; esto tenemos que permearlo en la Universidad, en todo el Estado y el país”. Asimismo, dijo, que los jóvenes deben de ser igual que sus mayores en cuanto a honestidad, valores y principios se refiere, pero muy diferentes en la práctica cotidiana porque el mundo ya cambió. “Queremos que los jóvenes nos digan cómo les ayudamos para salir adelante y qué tenemos que hacer para que la facultad siga mejor y para que sigamos poniendo orden en toda nuestra Universidad”. Por su parte, el Secretario de Salud en la entidad, Rafael Díaz Rodríguez, invitó a los presentes a recordar las raíces de la Facultad, en donde el doctor Ignacio Chávez, entre muchas de las cosas que legó, dejó su frase “estamos para atender al hombre que ha perdido lo más preciado de sus pertenencias, la salud”. “En estos tiempos de pérdida de valores y de altos estándares, hay que recordar que la facultad, los consultorios, hospitales y quirófanos existen para atender al hombre doliente y debemos hacerlo con sentido actual, responsable y profesional. La medicia ha evolucionado de una manera tremenda, lo que exige cada vez más a los actores responsables de enseñar, aprender y estudiar”, afirmó Díaz Rodríguez. De la misma manera resaltó que la recertificación en el horizonte de la dependencia universitaria exige un esfuerzo grande y adicional de toda la comunidad médica de la Facultad, porque enfrentamos hoy en día nuevos retos que anteriormente no existían y hay que adecuarse a la actualidad. “Hoy mas que nunca el médico está siendo evaluado, estamos bajo el escrutinio no sólo de los colegas, sino de las instituciones donde trabajamos, de la sociedad, de los familiares de nuestros pacientes, de la Comisión Estatal y Nacional de Derechos Humanos; y no está por demás repetir y subrayar que debemos ejercer nuestra docencia y profesión de manera responsable, oportuna y amable, porque todo esto se nos califica. México necesita gente comprometida que ponga su mejor esfuerzo en su formación académica y estoy seguro que serán retribuidos con muchas satisfacciones cotidianas durante su desempeño profesional”. A decir de la directora de la Facultad, Silvia Hernández Capi, este aniversario sirve como medio para refrendar le herencia humanística conferida por hombres y mujeres que han implantado su esfuerzo a través de los años, pero también para crear los votos olbigatorios para acelerar los pasos para que su complemento, la ciencia, mejore y permitan ofrecer mejores egresados y futuros profesionistas que la sociedad y los tiempos demandan. En su mensaje, Hernández Capi, hizo mención de los enfoques que tiene esta dependencia universitaria, en donde resaltó que se requiere adaptar sus programas de formación médica para que armonicen con las herramientas actuales, pero también con la formación de capacidades que sean las más óptimas a la finalidad del ejercicio propio de la profesión y adecuada a la realidad de una país; así como compaginar y mezclar la teoría con la práctica para augurar si no una mejoría total de egresados de la facultad, sí la cercanía al grado óptimo. “El papel que juega la facultad es formar modelos de seres humanos antropológicamente ideales, jueces y clínicos incorruptibles; educadores consagrados a su vocación, médicos con un grado de conciencia profesional y con grados altos de satisfacción en sus tareas al servir a una sociedad que les permitió una educación y que comprendan que serán los responsables de la salud de las futuras generaciones”. Asimismo mencionó que el papel de los formadores de futuros médicos es hacer entender que la ciencia es fría y exacta pero que se debe aplicar en seres humanos complejos; y para ello se requieren habilidades ténicas y humanas, así como de la filosofía para entender al ser humano y la historia para recordar los orígenes de la ciencia. “Nos compromete con una sociedad que merece algo mejor, toca a cada uno dar su mejor esfuerzo pegado a la honestidad; transformar las nuevas generaciones, aún pensandolo de manera egoísta, al saber que en ellos depositaremos nuestra salud y confianza y la de nuestros desendientes. Tenemos una acreditación en puerta que no queremos que sea sólo en el papel sino también en la realidad; nuestra meta es crear médicos con capacidad científica, de investigacion, pero tambien grandes humanistas”. A nombre de la plantilla académica, el profesor Antonio Sereno Color, refirió que impartir cátedra en la Facultad otorga prestigio y abre el entorno para el diálogo académico, establece una forma permanente de autoevaluación y permite el ejercicio y práctica de la investigación. Durante su intervención, expresó que el médico debe cubrir tres aspectos para integrar su pesonalidad: ciencia, docencia e investigación y exhortó a reflexionar en el papel que representa la facultad dentro de la Universidad y la ciudad, así como valorar qué tanto trasciende en el ámbito de la educación nacional. “Debemos ser un fino instrumento en la educación continua; tenemos a la mano las herramientas necesarias para lograr el progreso constante, la proyección siempre ascendente y conquistar un enorme y acreditado prestigio de nuestra aula mater”. Finalmente, en representación de la comunidad estudiantil, Juan Pablo Molina aifrmó que es necesario luchar por una facultad comprometida, que entienda y conozca que un profesional comprometido con el cambio social, con la igualdad y sobre todo con el sentir humano es quien nos puede llevar a lograr la visión que tuvieron los patriarcas de la medicina michoacana y que se pueden olvidar, ni abandonar. “La reacreditación del plan de estudios es un reto que estoy seguro se ha de cumplir gracias a la entrega diaria de toda la comunidad , por eso hago un llamado a no decaer y darle una seguridad más a la sociedad, por lo que exhorto a las autoridades estatales, municipales y universitarias para lograr este cometido, toda vez que no es un beneficio de pocos y sí un beneficio de muchos”, concluyó. Durante el evento, la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas “Dr. Ignacio Chávez” de la UMSNH, hizo entrega de un reconocimiento por su labor, esfuerzo y dedicación a los profesores: Antonio Sereno Color, Marta Mendoza Velázquez, María Antonia Serrano Espinosa y Héctor Padilla. Asimismo se reconoció a la familia Sodi por enriquecer el acervo cultural de la biblioteca de humanidades de la facultad, al hacer entrega de una parte de la biblioteca del doctor Demetrio Sodi y se distribuyó entre los asistentes el primero número de la revista “Humanidades médicas”. Finalmente las autoridades universitarias estatales y municipales montaron guardia de honor y colocaron una ofrenda floral en los bustos de los doctores Ignacio Chávez y Juan Manuel González Urueña.