Morelia, Michoacán.- “Pagos en exceso” por 1,401 millones de pesos, vicios ocultos y nómina inflada sobresalen entre las múltiples irregularidades detectadas por la Auditoría Superior de Michoacán en la construcción de la presa Francisco J. Múgica, inaugurada oficialmente hace ya cinco años. Odebrecht, el gigante corporativo acosado por la mayor investigación judicial sobre corrupción en la historia de Brasil, fue el ejecutor de la emblemática obra hidroagrícola “para llevar justicia social a la región de Tierra Caliente”. La Unidad General de Asuntos Jurídicos de la Auditoría Superior está dándole curso a cinco pliegos de responsabilidad económica por 988 millones de pesos no solventados por varios exfuncionarios estatales. “La inversión real en la obra tiene un valor presente neto negativo de 853 millones de pesos, así como una relación costo-beneficio de 0.57, es decir, el proyecto realizado no es socialmente rentable”, concluyó lapidariamente el órgano técnico de fiscalización del Congreso del Estado. El entonces gobernador Leonel Godoy Rangel, durante la inauguración de la presa en febrero del 2011, oficializó que la inversión global en la obra había superado los 2 mil 600 millones de pesos, de los cuales el 86 por ciento fueron de aportación estatal y solo 14 por ciento de origen federal. Para más información consulta la edición del 12 de marzo.