Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Ante el anuncio del paquete legislativo en el que trabajan los diputados locales, que contempla que hasta el 3.5 por ciento de los ingresos que tengan los organismos operadores de agua por concepto de servicio tendrán que ser redirigidos a los ejidos y sus propietarios para garantizar la preservación de los ecosistemas, pero con la posibilidad de aumentar en este mismo porcentaje sus tarifas a los consumidores de servicio, empresarios michoacanos se manifestaron en contra de un incremento en el precio. Líderes de diferentes cámaras, además, calificaron como pésimo el suministro de agua y desconfían que funcione este fondo ambiental, pues estos fideicomisos han fallado históricamente en la entidad.Si bien la ley no está prospectada sobre la industria o negocios como tal, también temen que en un futuro les impacte la medida, lo que les obligaría a ellos a ajustar sus tarifas al elevarse el costo de los insumos. También puedes leer: Organismos de agua potable de Michoacán, en rezago y así les cargarían nuevo ‘impuesto’ Esta medida sólo se aplicará en ciudades con un padrón superior a los 100 mil habitantes, entre las que se destaca Morelia, Zamora, Uruapan, La Piedad, Pátzcuaro, Lázaro Cárdenas y Apatzingán, y, aunque la Secretaría de Medio Ambiente Cambio Climático y Desarrollo Territorial (Semaccdet) asegura que no es un impuesto, se tratará de un pago obligatorio, recurrente y con capacidad de cargársele directamente a la ciudadanía. Semaccdet expuso que con este recurso se formará un fondo concurrente con los tres niveles de gobierno para apoyar el pago de servicios ambientales, sin embargo, el sector empresarial en el estado de Michoacán no considera que esta acción se vaya a cumplir y, como muchos fideicomisos, quedará únicamente en una simple medida recaudatoria, como el Impuesto Sobre el Hospedaje que no ha sido empleado ni transparentado conforme los acuerdos desde hace casi 4 años. Podría impactar a empresarios y costos En este sentido, Ricardo Bernal Vargas, presidente de la Asociación de Industriales en el Estado de Michoacán (Aiemac), declaró que, como representante de un sector empresarial en la entidad, jamás estará a favor de un impuesto a alguna carga similar obligatoria, mucho menos al que está propuesto, al considerar que las condiciones del servicio de agua potable en el estado son malas, al grado de que incluso algunas zonas no cuentan con ella. Si lo que buscan que es que el consumidor sea quien pague una cuota adicional en la tarifa del agua para que los órganos destinen capital a un fideicomiso para el cuidado de los ejidos, primero tienen que garantizar que toda la población cuente con un servicio de calidad y que no estén cortando el suministro cada tercer día por colonias”. Abelardo Pérez Estrada, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Morelia, declaró también estar en contra de la medida que está analizando el Congreso del Estado, ya que su aplicación podría ser un doble golpe a la economía michoacana. En primer lugar porque el cobro será sobre el consumo básico, aunque si esto trasciende y llega a las empresas, también será sobre la iniciativa privada, sector que tendrá que hacer un ajuste en los precios para con el consumidor final y cliente”. Por su parte, Alejandro Hernández Torres, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en Morelia, comentó que nunca van a aceptar nuevos impuestos o cobros recurrentes en Michoacán, “porque hacer una carga impositiva tomando como base la crisis económica por la que atraviesa el estado es complicado”, finalmente es la población en general quien lo resiente, no sólo un sector demográfico o al que se lo imponen. También puedes leer: Cargarán a organismos operadores de agua ‘impuesto’ por servicios ambientales Finalmente, los tres empresarios coincidieron que antes de pensar en imponer un gravamen al agua, primero deben acondicionar y mejorar su servicio, dotando de agua potable a toda la población en general, y a su vez, mejorar las plantas tratadoras de agua de algunos municipios, pues consideran que algunas demarcaciones necesitan ampliarlas e incrementar su capacidad, y aseguraron que ellos, como empresarios ,están a favor del cuidado del medioambiente de manera sustentable pero siempre bajo esquemas bien pensados. Temen sea un ‘Impuesto Sobre Hospedaje 2.0’ A destacar que en Michoacán una de las molestias en el sector empresarial con medidas similares es el Impuesto Sobre el Hospedaje, el cual carga a los negocios del ramo un 2 por ciento adicional desde hace varios años con la finalidad de crear un Fideicomiso de Promoción Turística, el cual sería administrado por empresarios y autoridades estatales. De 2016 a la fecha el recurso no ha sido utilizado según lo acordado, a tal grado que los hoteleros han exigido desde 2017 se transparente el manejo del fondo y se reintegre el dinero a los hoteles y prestadores de servicios turísticos en campañas de promoción, tal como había sido pactado. El temor de los empresarios es que el nuevo fideicomiso ambiental tenga un destino similar, con la agravante de que el 70 por ciento de organismos operadores de agua potable no ofrecen un servicio siquiera digno o tienen déficits financieros y de infraestructura, incluyendo el de Morelia.