Michoacán requiere una inversión de 7 mil millones de pesos en infraestructura y no sólo los 2 mil 700 millones que se tienen contemplados para el 2015, porque no se estaría solventando la necesidad de la población, afirmó el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), delegación Michoacana, Francisco Javier Gallo Palmer. Asimismo, puntualizó que es indispensable la creación de un Consejo Estatal de Infraestructura, donde se considere la participación de las organizaciones de la sociedad civil y de los constructores, para crear proyectos que cubran las necesidades de la sociedad y no sólo de las autoridades del Gobierno del Estado y Municipales. En entrevista para el foro noticioso de La Voz Tv, el empresario exhibió que el recurso para pagar pasivos y la inversión productiva del 2015 será insuficiente porque la necesidad es de 7 mil millones de pesos y no los 2 mil 700 millones que se tienen contemplados, principalmente porque no existen proyectos que cubran las necesidades de la población michoacana. Con esto, indicó que está en la espera que el Gobierno Federal inyecte los 5 mil millones de pesos que se requieren para que se compense con el mínimo trabajo que realizará el Gobierno del Estado. “Michoacán requiere de 7 mil millones de pesos, por loo que nos hacen falta 5 más; espero que el Gobierno Federal compense con obra”. Sin embargo, reconoció que otros de los requerimientos en Michoacán corresponden al trabajo que se realiza sin el conocimiento de las necesidades que tiene la sociedad. En ese sentido, Gallo Palmer comentó que el Gobierno del Estado no toma en cuenta las 500 organizaciones de la sociedad civil y mucho menos a los constructores para la creación de obra. Por lo que especificó que se requiere de un Consejo Estatal de Infraestructura, en el cual la sociedad civil pueda involucrarse y se concreten acciones a su favor y no en contra, como actualmente está pasado en la capital michoacana. “Quién decidió que se hicieran cuatro o cinco puentes en el libramiento norte, cuando tenemos la necesidad del libramiento sur, la creación de puentes en avenida Periodismo (…), se les ha cuestionado a las autoridades y no han sabido decir quien tomó la decisión de invertir 400 millones que se pudo planear de otra manera”, exhibió el empresario. Con esto, enfatizó que las autoridades del Gobierno del Estado y de los municipios, desconocen las necesidades y procedimientos que requiere la sociedad. Por lo que aseguró que si se llega a crear el Consejo Estatal de Infraestructura, se podría prevenir la mala inversión en obras que sólo benefician a unos cuantos y no a la mayoría de la sociedad, además que permitirá hacer una adecuación de las obras y la infraestructura pública. “Considero que es necesario mayor participación de la sociedad civil, hay más de 500 organizaciones y todas tienen que decir, experiencias que contar y propuesta que presentar; esto serviría para hacer una planeación a lo largo de los próximos 6 años”, expuso el presidente de la CMIC, delegación Michoacán. A lo anterior, comentó que generaría una unidad que requiere Michoacán respecto a la realización del trabajo en materia de infraestructura, donde la sociedad civil debe tener mayor participación. Con esto, exhibió que, antes, existía el Consejo Económico y Social de Michoacán, que fue constituido por el Congreso del Estado y que es fecha que no avanza porque no se cuenta con el interés para sacarlo adelante por parte de los diputados locales. Otro de los temas que destacó Francisco Javier Gallo, fue la cuestión de la deuda que todavía tiene el Gobierno del Estado con los constructores, principalmente porque se dejó de hacer los pagos que iban a liquidar los 420 millones de pesos con la autorización de l decreto 22. En ese sentido, el empresario reconoció que únicamente se les pagó 38 millones de pesos, por lo que viene un grave problema para las 120 constructoras de Michoacán, porque no se podrá pagar las prestaciones laborales que se tienen para esta temporada de diciembre, incluyendo el Seguro Social, INFONAVIT, hasta el aguinaldo. Por lo que afirmó que un total de 170 empresas se encuentran supeditadas a que se les paguen sus adeudos, o de lo contrario, tendrán que cerrar. “Hace unos días llegó un constructor a decirme que no sabía que hacer porque no dejaban entrar a la escuela a su hija, su empresa cerró”. Hasta el momento han sido 26 constructoras en Michoacán las que han tenido que cerrar por encontrarse en la quiebra. Sin embargo, aseguró que existe una promesa por parte del Gobierno del Estado para que se logre el pago de esta deuda. “La esperanza muere al último y sabemos que nos tienen que pagar, porque es un trabajo que hemos realizado y están disfrutando los michoacanos; el Gobierno del Estado tendrá que cumplir sus compromisos o buscaremos una manera distinta de poder cobrar”.