Jorge Manzo/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. No es ningún invento la violencia que se ha cometido en contra de las mujeres en Morelia. Por lo menos los dos casos que fueron viralizados a través de las redes sociales han sido denunciados ante el Ministerio Público y las víctimas no sólo perdieron sus pertenencias durante los atracos, también la confianza y la tranquilidad se les han esfumado. Dos hermanas que iban a casa después de comprar hamburguesas sufrieron un intento de ser “levantadas”, y otra mujer fue violentamente asaltada cerca del Templo del Santo Niño. Las tres son menores de edad y se sienten atemorizadas y decepcionadas, pues las autoridades las han revictimizado. Y no sólo eso: ninguna autoridad policial reconoce esas agresiones a pesar de que se materializaron con un par de denuncias penales ante la Fiscalía Regional de Morelia. “No son inventos mis golpes ni la corretiza que me dieron esos sujetos”, dijeron por separado a La Voz de Michoacán las víctimas, quienes prefirieron guardar el anonimato. Estos hechos los cometieron por lo menos cuatro personas que iban en el auto negro que identificaron como el Chrysler 300, narraron, y se coteja con las denuncias que están en poder de esta Redacción. En la comparecencia ante el Ministerio Público señalan directamente a quienes identifican como sus agresores, “pero siguen libres”. Revolución Social, la organización civil que les ha dado seguimiento a estos casos, ha sido denunciada de estar “fabricando” a presuntos culpables, e incluso de iniciar una campaña de psicosis; sin embargo, los videos que han sido la prueba inicial de que sí se registraron los hechos no sólo evidencian que hay casos, sino que las víctimas cuentan con nombre y apellido y tienen identificados a los agresores. “No sabemos por qué no han sido detenidos los responsables. Están plenamente identificados y en las denuncias penales han sido aportados datos para dar con ellos”, ratifica a su vez, Guillermo Valencia Reyes, quien lidera este grupo civil. A él se le ha acusado de actos indebidos en agravio de una familia, a quienes a su vez responsabilizó de los delitos en contra de las tres mujeres. Ellas los reconocen como sus agresores. “Sin duda”, enfatiza. Son tres hombres y una mujer los que habrían cometido los actos violentos a finales de enero. Se trata de un par de hermanos junto con su papá. Sobre la mujer, aún se siguen las pistas, aunque está ubicada en una transmisión en vivo que realizó Revolución Social cuando ubicaron la unidad. Ella trató de desviar la atención. “Son ellos”, afirman las víctimas, quienes hablaron para los lectores de La Voz de Michoacán. “No puedes olvidar a alguien que te golpeó a la cara”, dicen con voz entrecortada. El procurador General de Justicia, José Martín Godoy Castro, reconoció que se tienen cuatro denuncias penales, una de ellas es por intento de privación de la libertad y las otras tres concluyeron en robo con violencia en agravio de mujeres. Sin embargo, el municipio desconoce los hechos. Lo ha afirmado el alcalde Raúl Morón, y el secretario municipal, Humberto Arroniz. La comisionada Municipal de Seguridad, Julisa Suárez, se atrevió a decir que “no ocurrieron en Morelia”. El vehículo donde aparentemente se cometieron los hechos ya estuvo en poder de la Procuraduría General de Justicia. De acuerdo con los videos que se viralizaron en redes sociales, la unidad es de color negro, a la que se le pintaron los rines y trataron de camuflar. Cuando se cometieron los ilícitos el color era el original, aunque de un auto de la línea Charger. Hasta el momento, la Procuraduría en total tiene tres denuncias penales. Ahora, a través de las redes sociales, se han aportado mayores elementos para dar con el paradero de los sujetos que ahora han sido defendidos por la agrupación Fuerza Migrantes sin Fronteras, que lidera Pedro Fernández Carapia. Él asegura que miembros de la Procuraduría, de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y el activista Guillermo Valencia, presuntamente cometieron diversas violaciones en su contra con el fin de que se les inculpara por los recientes casos de presumibles intentos de secuestro de mujeres. Fernández dio a conocer la versión de los presumibles afectados al relatar que el 2 de febrero, Jovani Isai Rodríguez, de 17 años de edad, fue detenido en la avenida Morelos Norte por personas armadas que presuntamente se identificaron como policías, y durante horas consecutivas aparentemente lo golpearon, torturaron y amenazaron para que él, su padre Juan Carlos Rodríguez Guzmán y su hermano Juan Manuel Rodríguez Cisneros se inculparan por lo casos de intentos de secuestro a mujeres. De acuerdo con esta versión, hubo un momento en el que el menor de edad fue llevado a un lote baldío a espaldas de las canchas de la Liga Municipal de Morelia, a donde llegó un hombre en una camioneta, que era llamado “el jefe” por parte de los presuntos policías ministeriales y que el joven pudo reconocer como Guillermo Valencia. “Mi nieto reconoció a ese personaje que bajó de la camioneta y le dijo ‘tú eres Memo Valencia’, y uno de los policías le preguntó a mi nieto que si lo conocía y él respondió que sí. Entonces fue cuando esa persona les dijo a los policías que lo hicieran caminar por el baldío dando a espaldas a ellos. Ahí mi nieto pensó que lo iban a matar, y fue cuando escuchó que Memo Valencia les dijo que se lo llevaran a barandillas”, se lee en el comunicado presentado por Fernández y firmado por María Nalda Guzmán, abuela del menor. Cuestionado sobre por qué no han interpuesto una denuncia penal y además el presunto hecho se hizo público más de 10 días después, respondió que la familia se encontraba atemorizada ante los posibles acontecimientos, por lo que procedieron a hacer primero una denuncia pública, tras lo cual esperan que las áreas comiencen con la investigación del caso por oficio. Tras las acusaciones, el activista Guillermo Valencia Reyes tronó y ratificó que las personas están plenamente identificadas por las víctimas, no sólo por los videos que se han analizado de manera detallada, y advirtió que “alguien los está protegiendo”, y es por ello que no se ha procedido penalmente. “Ya se interpusieron las denuncias, 2 por robo con violencia y otras 2 jovencitas por intento de privación de la libertad”, dijo el también exdiputado local, quien cuestionado sobre las acusaciones negó que él haya dado órdenes para que se violaran sus derechos o se les golpeara. “Lo único que puedo decir es que esas tres personas, familiares de Fernández Carapia, son unos delincuentes, robaron con violencia a dos jovencitas e intentaron privar de la libertad a otras dos personas. Que los proteja el Nuevo Sistema de Justicia Penal, eso es otra cosa”. Ironizó que si él diera órdenes las personas estarían en la cárcel, e incluso mencionó que una de las evidencias que se tienen es una transmisión en vivo que realizó donde identificaron el vehículo en el que aparentemente se realizaron los crímenes, y “los muy cínicos negaron todo”. Mencionó que no tienen vergüenza, y se atrevió a destacar que ahora tendrán que averiguar los antecedentes penales de Pedro Fernández Carapia. El gobierno municipal ha desestimado los videos, mientras que para las víctimas son “un alivio que existan”, puesto que es una prueba de que sí ocurrieron. De manera concreta, el video que encendió la alarma, donde una menor de edad es agredida, le arrebatan su bolso y es golpeada, ocurrió a unos pasos del Templo del Santo Niño. Los locatarios reconocen que sí se suscitaron los hechos. Los casos Las menores de edad que denunciaron el intento de privación de la libertad compartieron las denuncias que fueron presentadas ante la Fiscalía Regional de Morelia. Los sujetos que iban a bordo del vehículo 300 de color negro las comenzaron a perseguir cuando se retiraron de un negocio de hamburguesas que se ubica sobre la calle Dalia, en la colonia El Porvenir. “No traíamos ni un objeto de valor, sólo las hamburguesas que acabábamos de comprar mi hermana y yo”, dijo a La Voz de Michoacán una de las víctimas, quien compartió que después se fueron acercando a ellas, hasta que decidieron correr y el vehículo aceleró para alcanzarlas. “Un sujeto intentó jalar a mi hermana para ingresarla al vehículo pero no lo logró porque corrimos al puesto de hamburguesas y yo a la casa de mi mamá, pero una tercera muchacha fue forcejeada hasta que intervinieron vecinos y le gritaron que la dejara. Le quitaron su bolsa de mano y por fortuna no lograron subirla”, compartió. Por otra parte, la menor de edad que fue asaltada violentamente denunció que los hechos ocurrieron antes de la medianoche, cerca del Templo del Santo Niño: ella iba con otra persona. Los sujetos descendieron del vehículo negro y los persiguieron, pero en un momento, uno de los asaltantes le arrebató la bolsa que ella traía, gritándole “dame tu puto morral”. Después le aventó un puñetazo en la mejilla derecha. “Se reventó el asa de mi bolsa y caí al suelo y me pegué en la cabeza. En eso ese sujeto se lleva mi bolsa dirigiéndose al vehículo, pero no conformes, otro sujeto comenzó a golpearme el cuerpo, y uno más con una pernera me dio otros puñetazos en mi intento de escaparme, hasta que lo logré”, según las narraciones que se encuentran ante la Fiscalía Regional.