Con información de Elizabeth Murillón, Carlos Casillas, Roberto Huitrón, Olivia Tirado, Fátima Miranda. Michoacán vive el Día de Todos los Santos y la noche previa al Día de Muertos entre contrastes, mientras en Pátzcuaro se abarrotan los michoacanos y turistas para observar de cerca la tradición de poner los altares y velar, en los panteones de Morelia se concentran familias que conviven alrededor de las tumbas y en Uruapan rezan en el camposanto de San Juan Evangelista, mientras que en Zitácuaro dan vida al cementerio San Carlos y en la costa así como en Los Reyes a los músicos y vendedores de flores no les va tan bien. Pátzcuaro es invadido por el olor a cempasúchil y las ofrendas son de las más buscadas esta noche, donde michoacanos y extranjeros se alistan para recibir el Día de Muertos en vela. El Panteón Civil de Morelia no cesa de recibir gente, la música, la comida y las flores forman parte del paisaje. En Uruapan los panteones municipales “San Juan Evangelista” y “Jardines de la Paz” son espacios donde se recuerda a los difuntos con ofrendas y rezos, en medio de un operativo de seguridad. El cementerio San Carlos es el más visitado en Zitácuaro este día y esta noche siguen desfilando a las tumbas de sus familiares, para llevarles música y comer sobre las lápidas. Para el municipio de Los Reyes, el silencio ganó terreno pues los músicos se quejaron de no ser tan solicitados como en otros años; sin embargo la vida en los panteones de la zona están más vivos que cualquier otro día. En Lázaro Cárdenas a los floristas les ocurrió algo similar, las ventas no han sido las mejores este primero de noviembre.