Javier Favela / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Las comisiones de Justicia y de Salud del Congreso del Estado, bajo control del PAN, mantienen congelada la iniciativa para la despenalización de la interrupción del embarazo antes de las 12 semanas de gestación en Michoacán, que había presentado el legislador Tony Martínez Soto, del PRD. “Al final del día, tenemos que dictaminar. Esa es la responsabilidad que tenemos como diputados. Espero que lo hagan a la brevedad posible, independiente de cual sea su postura”, apremió Lucila Martínez, la presidente de la comisión de Equidad de Género. La panista María del Refugio Cabrera Hermosillo encabeza la comisión de salud. El panista Antonio Salas preside la de justicia. El pasado 4 de agosto, la Comisión de Salud acordó fortalecer su agenda de trabajo y dar celeridad al análisis de diversas iniciativas que fueron turnadas por el Pleno del Congreso, entre las cuales se encuentra la despenalización del aborto. Actualmente Michoacán ya permite el aborto legal cuando el embarazo es producto de una violación sexual, el feto tiene malformaciones congénitas, la vida de la madre está en peligro o en caso de adversas condiciones socioeconómicas en la mujer. Foro, una embestida de ideales En incesantes embestidas verbales, activistas anti-aborto arremetieron en contra de la propuesta perredista de interrumpir el embarazo antes de la semana 12 de gestación en Michoacán, polarizando el foro temático convocado en el Congreso local y realizado este lunes. Los especialistas invitados por el diputado Tony Martínez Soto se atrincheraron en la posición pro aborto, argumentando y rebatiendo las acometidas de los adeptos de Pro-Vida. “Felicito a las madres de todos ustedes por haber decidido no abortarlos”, asestó un activista de pañuelo azul ante el panel de expertos, lo que provocó la respuesta exasperada de Alfonso Carrera Riva Palacio, titular del Colegio Mexicano de Ginecología y Obstetricia, golpeteado en esa tempestad de pasiones. Casi tres horas duró el foro pro-aborto. Inició con los portones cerrados para los disidentes, lo que desató enfurecida reacción de los cristianos de Pro-Vida, entonando Ave Marías y rezos a la virgen en plena vía pública. “Líbranos del aborto, alimenta nuestra fe”. El doctor Alfonso Carrera advirtió que el 45 por ciento de las mujeres que interrumpen el embarazo se exponen a un aborto inseguro. Contrastó que Michoacán penaliza como delito hacerse un aborto seguro, a diferencia de lo que ocurre en la Ciudad de México. Ante las increpaciones del bando contrario, el galeno exigió al activista tomar asiento y le condicionó solo hacerle una pregunta. “No hay peor sordo que el que no quiere oír”, se desquició el también integrante de la Asociación mexicana de Medicina de la Reproducción, cuyos argumentos médicos sonaban magistrales. Por su parte, Lourdes Enríquez Rosas, maestra en filosofía del derecho, relató la génesis de la Norma Oficial Mexicana 046, a raíz la violación de Paulina, una menor de 13 años de edad en Baja California, cuyo gobierno le negó la posibilidad de abortar, llegando el caso hasta la Corte Interamericana de los Derechos Humanos. Ante las frecuentes interrupciones del grupo disidente, Enríquez pareció perder los estribos y diagnosticó una anomalía mental en las activistas de Pro Vida: “Intervención psicológica requiere ese profundo deseo de que todas las mujeres seamos madres, sí o sí”. A su vez, Verónica Cruz Sánchez, activista de derechos humanos y galardonada con premio internacional de Human RightWatch, describió que la mayoría de las violaciones sexuales de niñas y adolescentes son cometidas en los hogares por parte de padres, padrastros, parejas, primos, tíos y abuelos. Justificó la falta de denuncias penales por sentimientos de miedo, culpa y vergüenza, así como falta de confianza en las instituciones. Encarando las pasiones encendidas, identificó como anti-abortistas a los del movimiento celeste, incluida la iglesia católica y la mayoría de los partidos. Y asumió: “ustedes no me van a convencer y nosotros no las vamos a convencer”, pronunciándose por apoyar a las mujeres sin posición. Y sentenció que el aborto es necesario bajo el actual clima de violencia generalizada con ausencias del Estado mexicano.