Jorge Manzo / La Voz de Michoacán. Morelia, Michoacán.- Hace 355 días Silvano Aureoles Conejo asumió el Gobierno del Estado, y en ese momento advirtió un golpe de timón en la política estatal que estaban en “terapia intensiva” derivado de los problemas financieros que “ahogaban” varios rubros entre ellos el de la seguridad, salud, desarrollo social y educación. En ese momento prometió un “Nuevo Comienzo”, gasto racionalizado, cero tolerancia a la corrupción, una policía confiable, y que en tres años, Michoacán sería la entidad más segura del país, sin embargo, apenas se está “tomando vuelo” y los resultados no se alcanzarán de un año a otro. El resquebrajamiento que sufrieron las estructuras del estado urgen una “cirugía mayor”, sobre todo para reactivar el trabajo en las áreas que dependen de subsidios, una de las principales causas del colapso estatal. En gran medida, la coordinación entre la administración estatal y el Gobierno de la República ha permitido que “respire” la entidad y que fluyan los remanentes del Plan Michoacán así como proyectos adicionales que se han conseguido en las áreas federales, en donde también están padeciendo “meses negros” derivado de los obligados recortes para enfrentar la crisis mundial.
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