Maricruz Rios/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Pese a ser una de las entidades más importantes en cuanto a producción de mezcal, de los miles de litros que se producen de esta bebida al año en Michoacán, sólo el 2.6 tiene el carácter de certificación, por lo que las autoridades estatales perciben un “cuello de botella” con esta problemática, ya que la certificación es la llave de la exportación. En este sentido, el Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) informa que la producción de agrave, principal ingrediente dentro del proceso del mezcal, ha venido lenta esta temporada en Michoacán. De las 5 mil 524 hectáreas sembradas, sólo se tiene el reporte hasta el momento de que se han cosechado 10, por lo que la producción de agave es de 213 toneladas hasta el mes de mayo. Sin embargo, esta cantidad deberá dispararse en las próximas semanas, en cuanto se comience a tener mayor aprovechamiento de las tierras cultivadas. El año pasado, hasta el mes de mayo, sumaban 6 mil 084 hectáreas sembradas y 131 cosechadas, para un total 7 mil 780 toneladas de agave. La problemática sobre la que ha insistido el Sistema Producto Mezcal en Michoacán es que, a pesar de las hectáreas sembradas, al año cuentan con muy pocas hectáreas de agave mezcalero en etapa de maduración, que, dependiendo de la especie puede tomar al menos cinco años en llegar a esta etapa. Raúl Cortés, presidente de este Sistema Producto, ha señalado además que, de la mano de la producción de mezcal debe ir la de agave mezcalero, debido al lento proceso de maduración y a que no todos los productores tienen siembras de la planta. Esto obliga a los mezcaleros a importar insumos de otros estados, principalmente Jalisco, lo que encarece la elaboración del producto final. Otra problemática de destaca es la falta de certificaciones, pues únicamente unos 20 productores, de los 400 que hay en Michoacán, cuentan con una certificación que valida la calidad de la bebida que producen, y que para el mercado de exportación es más importante que la misma Denominación de Origen. Ante este panorama Rubén Medina Niño, titular de la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentario (Sedrua), consideró que “todavía hay mucho por hacer en el tema del agave y el mezcal”, pues contar con la llamada Denominación de Origen de muy poco sirve si no se logra certificar el mezcal para que éste pueda ser exportado sin mayores problemas. De acuerdo con las cifras de Sedrua, en Michoacán se tienen registradas 100 vinatas con 300 productores agrupados, pero solamente ocho cuentan con la certificación, mientras que otras 20 apenas se encuentran en el proceso para obtenerla. El funcionario detalló que de los 750 mil litros de mezcal que se calcula producen al año, sólo 20 mil, el 2.6 por ciento, cuentan con certificación y pueden acceder a mecanismos de exportación a mercados internacionales. En este sentido, Rubén Medina Niño explicó que tener un mezcal, con todo y denominación de origen y buena calidad, “es un tesoro enterrado” si no se certifica, por lo que instó a los productores de agave y mezcal a acercarse a los cursos, capacitaciones y talleres que ofrece la Universidad Virtual de Michoacán (UNIVIM) sobre el tema. Cabe mencionar que un grupo de productores criticó este programa de educación virtual, pues consideraban que carecían de lo más básico, que eran equipos de cómputo, conexiones estables a Internet e incluso el conocimiento de cómo operan estas plataformas.