Juan Bustos/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. La inclusión de la filosofía en educación básica es una tarea pendiente, donde se debe tomar en cuenta a las universidades públicas con la idea de fomentar el pensamiento crítico articulándose con los diferentes niveles educativos, de secundaria hasta bachillerato, por ello se estableció la Red Interinstitucional de Estudios sobre Filosofía y Educación, que impulsa el Programa de Filosofía para Niños, expuso María del Socorro Madrigal Romero, académica nicolaita. En entrevista con La Voz de Michoacán, la representante de la Red en la Universidad Michoacana apuntó que actualmente este programa tiene impulso, particularmente en el sector privado, curiosamente y paradójicamente hay esfuerzos muy focalizados en el sector público. Tajante, la académica apuntó que muchas veces en la educación básica se imponen modas de propuestas educativa donde se transita como educación emocional u otros enfoques, que, sin embargo, son parcializados. “Lo que ofrece Filosofía para Niños no es la enseñanza de historia de la filosofía, sino aprender a pensar; opinamos que también se debe articular en los niveles de enseñanza desde prescolar hasta bachillerato”, apuntó. “Cuando se revisan las pruebas estandarizadas el 90 por ciento de los niños pueden expresar sus opiniones, pero solamente un 30 por ciento los puede fundamentar”. La académica expuso que la Red que comenzó a operar hace cerca de año y medio, tiene la finalidad de conjuntar esfuerzos y conocer las experiencias en torno propuestas de enseñanza de la filosofía como es la propuesta de Matthew Lipman de filosofía para niños. Madrigal Romero indicó que después de algunos años de trabajar directamente con los procesos de formación de los maestros ya se ha estado haciendo acompañamiento en las aulas, y se dieron cuenta de que tenían que se debería tener un marco institucional amplio en el sentido de saber si había experiencias similares en el país y fuera de él, por ello el nacimiento de la Red. “De igual forma, desde el inicio de este proyecto estuvimos acompañados por la doctora Teresa de la Garza Camino, que es la precursora del programa de Filosofía para Niños en el país, dado que fue formada por directamente del autor del programa en la Universidad de New Jersey, Estados Unidos, y ella junto a otros profesores que hicieron el posgrado en la universidad estaban encargados de diseminar el proyecto de filosofía para niños en sus países respectivos”, apuntó. Además, en un contexto del surgimiento de un movimiento en los últimos años de filosofía aplicada se le considera también filosofía extramuros, “no es que está en contra de la filosofía académica, sino es más bien recuperar el sentido original de la filosofía, no aquella que se practicaba con Sócrates en los mercados y en las plazas, etcétera”. Detalló experiencias con académicos de la UNAM, la Universidad Autónoma de Querétaro y la Universidad de Colima, “José Ezcurdia, un filósofo mexicano, tiene un trabajo similar al de Lipman, y contextualizado en el territorio en México; él ha trabajado talleres filosóficos con los niños en Chiapas y en la Sierra Tarahumara”. A pregunta, la académica expuso que hay un vacío enorme es la educación del pensamiento en el nivel básico, subrayó que existe el privilegio de las asignaturas de lenguaje y matemáticas, porque se cree que son las únicas que desarrollan el pensamiento. “Sin embargo, cuando revisas los planes y programas de estudio se trabaja el lenguaje, pero se trabaja lenguaje de la boca hacia afuera, no la conexión que hay en lenguaje con el pensamiento, entonces no hay un planteamiento serio de desarrollar habilidades de pensamiento en los niños”, enfatizó. Incluso detalló que esta propuesta es compatible con propuestas como la pedagogía freireana, que es impulsada por un sector del magisterio, “Lipman y Paulo Freire se encontraron en algún momento, intercambiaron planteamientos que no son tan distantes de la idea de incorporar a la filosofía como mediadora de los aprendizajes de los niños, es lo que Freire plantea de una educación emancipadora, de empoderar a los niños a través del desarrollo del pensamiento crítico de pensamiento creativo que busca alternativas”. Abundó que este planteamiento de Filosofía para Niños atraviesa diferentes aspectos que son importantes y que se maneja por separado, como es la ética, derechos humanos y hasta el cuidado del medioambiente “El pensamiento ético, que es una de las cuestiones fundamentales de formar ciudadanos críticos y cuidadosos de sí mismos y de los otros, para poder tener una democracia real, no como la que tenemos, solamente representativa, en la que vamos a votar cada año, sino realmente un ciudadano que se involucre con los problemas de la sociedad”, finalizó.