La alcaldesa de Baltimore pidió el miércoles a investigadores federales que indaguen si la policía municipal muestra un patrón de uso excesivo de la fuerza y discrimina a la población. La alcaldesa Stephanie Rawlings-Blake dijo que aunque las quejas por uso excesivo de la fuerza y las demandas por supuesta conducta indebida han disminuido en los últimos años, "todos sabemos que en Baltimore hay una relación fracturada entre la policía y la comunidad". Baltimore fue escenario de disturbios luego de la muerte de Freddie Gray, un hombre negro que fue detenido por la policía y sufrió una fuerte lesión en la columna vertebral mientras estaba bajo custodia de la policía. Inconformes lanzaron botellas y ladrillos contra la policía en un motín el 27 de abril, que dejó un saldo de casi 100 agentes lesionado. Más de 200 personas fueron arrestadas mientras negocios y vehículos ardían. El gobernador de Maryland, Larry Hogan, declaró el estado de emergencia y llamó a 2.000 efectivos de la Guardia Nacional y la policía estatal para auxiliar a los agentes. Hogan levantó el estado de emergencia el miércoles y dijo que se ha retirado a todos los elementos de la policía estatal. Indicó que se usaron 20 millones de dólares del fondo para emergencias por lluvia para la respuesta del pasado fin de semana. La solicitud de la alcaldesa fue presentada un día después de que la nueva secretaria de Justicia, Loretta Lynch, visitó la ciudad y prometió mejorar la fuerza policial. Lynch dijo a líderes cívicos y comunitarios que "estamos aquí para ayudarlos y ofrecer apoyo". La alcaldesa dijo que el Departamento de Justicia responderá positivamente a su solicitud de una investigación. Un portavoz de la Policía de Baltimore no respondió de inmediato a la solicitud de la alcaldesa. La alcaldesa también dijo que los agentes municipales tendrán cámaras corporales para finales de año. El Departamento de Justicia ya está investigando si se violaron los derechos civiles de Gray y seis agentes enfrentan cargos por su arresto y muerte, que van desde agresión hasta asesinato en segundo grado. La nueva investigación solicitada por la alcaldesa es similar a la realizada en Ferguson, Missouri, tras la muerte de un joven negro de 18 años a manos de un policía blanco. Estas pesquisas tratan de identificar patrones de discriminación y pueden analizar cómo los agentes usan la fuerza y arrestan a sospechosos. Jack Young, concejal de Baltimore, ha pedido una investigación de ese tipo desde octubre, dijo su portavoz Lester Davis. "La única forma en que vamos a tener reformas significativas y duraderas que generen resultados es a través de una investigación completa de derechos civiles", dijo Davis. Cuando se anunció la pesquisa en Ferguson en septiembre, se dijo que era parte de un esfuerzo más amplio del Departamento de Justicia para investigar a cuerpos policiales con problemas y, si se encontraban dificultades generalizadas, se implementarían cambios directos. El Departamento de Justicia dijo entonces que ha investigado a 20 cuerpos policiales por una gama de conductas indebidas sistémicas en los últimos cinco años, dos veces el número de casos abiertos en los cinco años anteriores. Estas investigaciones en ocasiones pueden llevar a un acuerdo, llamado decreto de consentimiento, en que el departamento de policía acuerda implementar cambios específicos y se nombra un supervisor externo para asegurar que la policía cumple el acuerdo.