El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció esta noche un plan de alivio migratorio que frena la deportación y legaliza la presencia de hasta cinco millones de indocumentados por al menos tres años, a pesar del rechazo de los republicanos. “Hoy nuestro sistema migratorio esta descompuesto”, dijo Obama en un mensaje a la nación en momentos en que la mayoría de los estadunidenses apoya una legalización de indocumentados pero está dividido sobre la conveniencia de hacerlo sin apoyo del Congreso. Obama, quien sostuvo que tiene la autoridad legal para hacer los cambios de manera ejecutiva, aseguró que sus acciones buscarán fortalecer la seguridad fronteriza, cambiar las prioridades de deportación y dar alivio a padres de ciudadanos o residentes.