Notimex / La Voz de Michoacán Buenos Aires, 10 May.- La investigación de un presunto lavado de dinero que involucra al fallecido ex presidente argentino Néstor Kirchner avanzó hoy con nuevos allanamientos a la financiera de donde habrían salido 55 millones de euros (71 millones de dólares). El juez federal Sebastián Casanello, quien está a cargo de la causa, ordenó una nueva inspección en la financiera SGI, la cual creó decenas de firmas fantasma por pedido del empresario Lázaro Báez, íntimo amigo y socio de Kirchner. Federico Elaskar, ex propietario de SGI, había declarado que en los seis primeros meses de 2011, a poco de morir Kirchner, Báez contrató sus servicios para poder enviar millones de euros en efectivo a una cuenta en Suiza. La ruta del dinero comenzaba en Santa Cruz, la provincia donde nació Kirchner y que gobernó durante 12 años antes de ser presidente de Argentina. Desde que Kirchner se afianzó en el poder provincial, Báez se transformó y pasó de ser un sencillo empleado bancario a un millonario empresario, gracias sobre todo a la adjudicación de contratos de obras públicas. Según las denuncias presentadas, Báez amasó, con la complicidad de Kirchner, millones de euros en efectivo que trasladó de Santa Cruz a la financiera en Buenos Aires, para luego ser transferidos a cuentas en Uruguay, Panamá y, finalmente, Suiza. El escándalo sobre el presunto lavado de dinero comenzó el mes pasado, cuando un programa de la televisión local denunció los supuestos manejos ilegales de dinero por parte de Báez, quien hasta ahora ha negado todos los cargos. Aunque en un primer momento quedó excluido de la causa, la semana pasada el fiscal Guillermo Marijuan imputó al empresario por el delito de asociación ilícita para lavado de dinero, aunque el juicio todavía no tiene fecha de inicio.