Para un grupo de berlineses audaces, la Navidad es tiempo de canciones, vestimenta roja... y un chapuzón en las aguas gélidas de un lago. Decenas de nadadores del club Seehunde Berlin (Focas de Berlín) llegaron el jueves al lago Oranke de la capital para su chapuzón navideño anual, con todo y gorras rojas. La temperatura ambiente era relativamente moderada para la época del año, con 5 grados centígrados (41 F), pero lo suficientemente fresca como para que los nadadores entraran en calor cantando canciones navideñas antes de arrojarse al agua. "Lo mejor es la sensación posterior", dijo la nadadora Beate Korehnke. "Hay un escozor en todo el cuerpo, como un sauna pero al revés".