Agencia/ La Voz de Michoacán. Con el fantasma de una crisis bilateral acechando las relaciones entre Washington y Beijing, el gobierno de Barack Obama se negó ayer a confirmar que Estados Unidos y China se encuentran en medio de una guerra cibernética. Ante las explosivas revelaciones que apuntan hacia el sistemático robo de información estratégica desde 2006, a través de una operación encubierta de los servicios de inteligencia chinos, la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, se negó ayer a confirmar la existencia de facto de una guerra cibernética. Sin entrar en el fondo de una información revelada por la empresa Mandiant, con sede en Virginia, denunciando el robo de cientos de terabytes de información desde 2006, la portavoz del Departamento de Estado se limitó a reconocer que “este tipo de actividad es una amenaza no sólo para la seguridad nacional, sino para los intereses económicos de Estados Unidos”. A su vez, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, se abstuvo de comentar de forma directa los hallazgos de Mandiant, pero reconoció que “las ciberintrusiones y el robo de información comercial representan una de nuestras mayores preocupaciones y una seria amenaza para la seguridad nacional”. “EU y China están entre los mayores actores cibernéticos del planeta, y es vital que mantengamos un diálogo continuo y significativo y trabajemos juntos para desarrollar un entendimiento de lo que es el comportamiento aceptable en el ciberespacio”, añadió Carney. Tras el revuelo causado por las revelaciones, funcionarios de la embajada de China en Washington se negaron a confirmar la veracidad de los reportes y se remitieron al desmentido oficial de su cancillería. “Nuestro gobierno ya se ha pronunciado”, señalaron en referencia a las declaraciones de su portavoz en Beijing, Hong Lei, quien desmentió los reportes y advirtió que “hacer acusaciones sin fundamento, sobre la base de material en bruto, no es ni responsable, ni profesional”. Dan McWhorter, director en el Departamento de Amenazas de Inteligencia de Mandiant, insistió ayer que “el impacto y la escala de las operaciones (de ciberespionaje) descubiertas no nos dejaron más remedio que elaborar este reporte”. Según Mandiant, sus pesquisas les llevaron hasta un vecindario en las afueras de Shangai donde hay un edificio de 12 pisos dirigido por la Unidad 61398 del Ejército Popular de Liberación. “La unidad ha robado sistemáticamente cientos de terabytes de información de por lo menos 141 organizaciones”, se denuncia. “A partir de las investigaciones que realizamos en todo el mundo, este es uno de los grupos más prolijos de espionaje cibernético en términos de la cantidad de información robada”, dijo McWorter. (Con información de agencias)