EFE / La Voz de Michoacán Washington. La presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., la demócrata Nancy Pelosi, explicó este martes en una columna de opinión que su visita a Taiwán sirve para “apoyar” la democracia de la isla ante las “amenazas” que sufre por parte de China. “Al viajar a Taiwán, honramos nuestro compromiso con la democracia y reafirmamos que las libertades de Taiwán y de todas las democracias deben respetarse”, afirmó en un artículo publicado por el The Washington Post tras llegar a la isla. Pelosi aterrizó a las 22:43 hora local (14.43 GMT) en el aeropuerto Songshan de Taipéi, donde comenzó una visita contra la cual China había anunciado represalias. En su columna de opinión, la líder de la Cámara Baja defendió que Estados Unidos debe “apoyar a Taiwán”, a la que tildó como una “democracia vibrante y robusta” que “está bajo amenaza”. Criticó que en los últimos años “Pekín ha intensificado de forma dramática la tensión con Taiwán”, con el aumento de operaciones aéreas en la zona, ataques cibernéticos contra agencias taiwanesas e intimidaciones contra países que cooperan con la isla. “Ante la agresión del Partido Comunista Chino, la visita de nuestra delegación del Congreso debe verse como una declaración inequívoca de que Estados Unidos apoya a Taiwán, nuestro socio democrático, mientras defiende su libertad”, dijo. No obstante, Pelosi reiteró que su viaje “de ninguna manera contradice” la posición de Estados Unidos sobre Taiwán, que desde 1979 apoya la política de “una sola China” y se opone a la independencia de la isla. Subrayó que “la solidaridad de Estados Unidos con Taiwán es más importante hoy que nunca”, no solo por los 23 millones de habitantes de la isla, sino también para “los otros millones de oprimidos” que hay en China. En ese sentido, citó la “brutal represión” en Hong Kong, la “campaña para borrar la identidad” del pueblo tibetano y el “genocidio” contra uigures musulmanes en Xinjiang. Se trata de la primera visita de un presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU. a Taiwán desde 1997, cuando el republicano Newt Gingrich estuvo en la isla. Ni Pelosi ni el Ministerio de Asuntos Exteriores de Taiwán habían confirmado si la gira que la funcionaria lleva a cabo por Asia incluiría una visita a Taiwán, posibilidad adelantada por medios estadounidenses y taiwaneses. Este martes, la Cancillería china aseguró que es “difícil imaginar una acción más temeraria y provocadora” por parte de Estados Unidos que esta visita, sobre la cual el Ejército chino ya advirtió recientemente que no se “quedaría de brazos cruzados”. Poco antes de la llegada de Pelosi a Taiwán, medios estatales chinos informaron del cruce del estrecho de Taiwán por aviones militares chinos SU-35, sin que de momento se hayan facilitado más detalles al respecto. China reclama la soberanía de la isla y considera a Taiwán una provincia rebelde desde que los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí en 1949, tras perder la guerra civil contra los comunistas. La Casa Blanca afirma que no hay ninguna violación con la visita de Pelosi La Casa Blanca aseguró este martes que “no hay ninguna violación o problemas de soberanía” con la visita de la presidenta de la Cámara Baja de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán. El coordinador de Comunicaciones del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo en una entrevista con la cadena de televisión CNN que su país no apoya la independencia de Taiwán y que la visita de Pelosi únicamente “reafirma la política de una sola China”, defendida por Pekín. Kirby quiso restar importancia al viaje y reiteró que en el pasado otros líderes del Congreso de EE.UU. visitaron la isla, “agregaría que un expresidente de la Cámara Baja lo hizo ahora hace unos 20 o 25 años”. Kirby aseguró que su país no se va a ver intimidado por “las amenazas” de China, que este martes advirtió de que Taiwán se enfrenta a “consecuencias desastrosas” si “Estados Unidos gestiona mal la situación en el estrecho”. La portavoz de la Cancillería china Hua Chunying apuntó que es “difícil imaginar una acción más temeraria y provocadora” que la visita de Pelosi, al tiempo que extendió la posibilidad de “consecuencias desastrosas si Estados Unidos se equivoca en su juicio” no solo para Taiwán, sino para la “prosperidad y seguridad del mundo entero”. Kirby recordó que EE.UU. ha visto esta “retórica belicosa” de China en los últimos días, semanas y meses, además de ver una actividad militar china “más agresiva, más coercitiva” cerca del estrecho de Taiwán. Reiteró que su Gobierno no se va a amilanar y que tiene “compromisos de seguridad serios en la región: “Tenemos cinco o seis tratados de alianza en el Indopacífico, nos tomamos esos compromisos en serio y vamos a seguir haciéndolo”, remarcó. Kirby dijo que seguirán de cerca la situación y consideró que no hay motivo para que esta visita se convierta en una crisis o conflicto, o que sirva de pretexto para que Pekín lleve a cabo alguna acción militar, porque EE.UU. no ha cambiado su política hacia Taiwán.