El papa Francisco destacó el papel del papa Juan Pablo II en la caída del Muro de Berlín e instó a la gente a construir puentes abriendo los corazones. Francisco conmemoró el domingo el 25 aniversario de la destrucción del muro que simbolizaba la guerra fría haciendo un llamado a aquellos de buena voluntad para promover una "cultura de la unión" para derribar todas las barreras que aún dividen al mundo. Al saludar a las personas congregadas en la Plaza de San Pedro, el pontífice rindió homenaje a los que trabajaron para derribar el muro berlinés, incluyendo a los que pagaron con su vida. El apoyo que Juan Pablo II dio al sindicato Solidaridad de su natal Polonia fue importante para ayudar a la desaparición del comunismo en el bloque soviético. Francisco oró para que "nunca más personas inocentes sean perseguidas o asesinadas por su creencia o religión".