Agencias / La Voz de Michoacán. El Papa Francisco ofició hoy una misa en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, al cierre de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), a la cual asistieron casi cuatro millones de católicos, informó la estatal Agencia Brasil. A la llamada Misa de Envío, con la cual se clausuró la jornada juvenil que inició el pasado martes, concurrió la presidenta brasileña Dilma Rousseff y los mandatarios de Argentina, Cristina Fernández, y de Bolivia, Evo Morales, entre otros. En su homilía, el pontífice hizo un llamado a los jóvenes a llevar el Evangelio "a todos" y señaló: "¿Qué nos dice hoy el Señor? Tres palabras: vayan, sin miedo, para servir". "Jesús se dirige a cada uno de ustedes diciendo: ?Qué bonito ha sido participar en la Jornada Mundial de la Juventud, vivir la fe junto a jóvenes venidos de los cuatro ángulos de la tierra, pero ahora tú debes ir y transmitir esta experiencia a los demás?", dijo el Papa. Llamó a los millones de jóvenes congregados en Copacabana a "compartir la experiencia de la fe, dar testimonio de la fe, anunciar el evangelio es el mandato que el Señor confía a toda la Iglesia, también a ti". El pontífice agregó que "no tengan miedo de ir y llevar a Cristo a cualquier ambiente, hasta las periferias existenciales, también a quien parece más lejano, más indiferente". Luego preguntó a los asistentes "¿saben cuál es el mejor medio para evangelizar a los jóvenes? Otro joven. Este es el camino que hay que recorrer", tras lo cual le pidió a los obispos acompañar a los jóvenes con alegría y ayudarlos en su compromiso. El Papa Francisco anunció que la próxima Jornada Mundial de la Juventud se realizará en 2016 en Cracovia (Polonia). Tras esta multitudinaria actividad a lo largo de tres kilómetros de playa en Copacabana, el Papa almorzará con cardenales y obispos en el Centro de Estudios de Sumaré y luego se reunirá con miembros de la Coordinación del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam). En forma posterior sostendrá un encuentro con voluntarios que participaron en la JMJ y se trasladará a la Base Aérea do Galeao para abordar el avión que lo llevará de regreso a Roma tras casi una semana en Brasil.