EFE / La Voz de Michoacán Afganistán. El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó este jueves el asesinato de la periodista afgana Malala Maiwand, que fue tiroteada y perdió la vida hoy junto a su conductor en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán. En un breve comunicado difundido por uno de los canales de propaganda del EI en Telegram, el grupo afirmó que "los soldados del califato tuvieron como objetivo a la periodista leal al régimen afgano Malala Maiwand en la ciudad de Jalalabad con una pistola, lo cual llevó a su muerte". El comunicado no ofreció más detalles ni mencionó a la persona que la acompañaba. Por su parte, el portavoz del gobernador de Nangahar, Attaullah Khogyanai, dijo a Efe que el tiroteo se produjo esta mañana hacia las 07.10, hora local (02.40 GMT), en la capital provincial, Jalalabad, cuando la periodista se trasladaba de su casa a su oficina. Malala Maiwand, que trabajaba como presentadora en el canal de la televisión local Enakas y además desempeñaba un rol activo en la comunidad como activista de la sociedad civil, "fue asesinada a tiros junto con su conductor", precisó el portavoz. El presidente afgano, Ashraf Ghani, condenó el asesinato de la periodista y su conductor al tiempo que pidió a las autoridades una investigación del ataque "terrorista". Este es el más reciente de una serie de asesinatos selectivos cometidos en el país contra figuras prominentes de la sociedad civil, desde periodistas a defensores de los derechos humanos, que han sido blanco de ataques cada vez más frecuentes en el último año. Afganistán es considerado además uno de los países más peligrosos para los periodistas, y ocupa el puesto 122 de 180 en la clasificación mundial de la libertad de prensa 2020 de Reporteros Sin Fronteras (RSF). El mes pasado los periodistas afganos Elyas Dayee, de la emisora Radio Free Europe/Radio Liberty, y el prominente presentador televisivo Yama Syawash, que estuvo vinculado al popular canal privado Tolo, murieron en dos atentados con bomba lapa colocadas en sus vehículos. Los informadores son amenazados tanto por el EI como por los talibanes en el marco del conflicto de casi dos décadas en Afganistán.