Agencias / La Voz de Michoacán Washington, EUA. Una semana después de la investidura del presidente de EE.UU., Donald Trump, el Departamento de Justicia del país anunció que había despedido a varios abogados involucrados en el enjuiciamiento al mandatario, en medio de una supuesta "campaña de represalias" de Trump contra sus "enemigos", recoge NBC. Los funcionarios trabajaron en la investigación del exfiscal especial Jack Smith, que lideró los casos federales contra el actual presidente por interferencia electoral y mal manejo de documentos clasificados. Smith presentó su renuncia el pasado 12 de enero. "Hoy, el fiscal general interino James McHenry rescindió el contrato de trabajo de varios funcionarios del Departamento de Justicia que desempeñaron un papel importante en la persecución al presidente [Donald] Trump. A la luz de sus acciones, el fiscal general interino no confía en que estos funcionarios ayuden a implementar fielmente la agenda del presidente", aseguró un funcionario de la cartera a NBC, señalando que la decisión "es coherente con la misión de poner fin a la utilización como arma del gobierno", en referencia a una orden ejecutiva que el mandatario emitió horas después de su investidura. Durante la campaña electoral, Trump afirmó que todas las investigaciones en su contra respondían a una "caza de brujas" con motivos políticos y que pretendían socavar su candidatura a la reelección. Sin embargo, expertos legales indican que el mandatario no debería tomar represalias hacia los funcionarios, ya que simplemente estaban haciendo su trabajo, y, en algunos casos, fueron asignados a las investigaciones. Ola de despidos Por otra parte, la misma jornada, fueron despedidos tres demócratas pertenecientes al Consejo de Supervisión de la Privacidad y las Libertades Civiles, lo que podría significar un prolongado periodo de inactividad para el organismo de control independiente, reporta Bloomberg. Trump había prometido despedir a los demócratas del consejo si no dimitían antes del 24 de enero. La noche del viernes, el mandatario llevó a cabo una "purga nocturna", al despedir al menos a 15 inspectores generales de varias agencias federales. El mandatario defendió la decisión asverando que no conocía a los funcionarios, a pesar de que muchos de ellos fueron nombrados por él durante su primer mandato. Además, la Administración de Trump abrió un "proyecto especial" para investigar y tomar medidas en contra de los fiscales que supervisaron las causas penales por obstrucción contra algunos de los acusados por el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.