Redacción / La Voz de Michoacán Texas. La Corte Suprema de Texas decidió permitir que la nueva ley estatal, la cual prohíbe tratamientos de afirmación de género en menores, entre en vigor el próximo viernes. Esta determinación convierte a Texas en el estado más poblado de Estados Unidos con restricciones de este tipo aplicadas a niños transgénero. Defensores legales, incluyendo la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), que presentaron la demanda en nombre de familias y médicos, han calificado tanto la ley como la decisión de la Corte Suprema como "crueles". En un comunicado conjunto emitido el jueves, los grupos de defensa señalaron que "los jóvenes transgénero y sus familias se ven obligados a comenzar el año escolar con miedo por lo que les depara. Pero queremos dejar claro que la lucha está lejos de haber terminado". La semana pasada, un juez de distrito estatal dictaminó que la ley pendiente violaba los derechos de los niños transgénero y sus familias al negarles el acceso a atención médica adecuada. Además, se afirmó que la ley ponía en riesgo la capacidad de los médicos para seguir pautas médicas "bien establecidas y basadas en evidencia" bajo la amenaza de perder sus licencias. El juez emitió una orden judicial temporal para bloquear la ley, y las autoridades estatales presentaron de inmediato una apelación ante el tribunal más alto del estado para casos civiles. La decisión de la Corte Suprema estatal, compuesta en su totalidad por miembros del partido republicano, permite que la ley entre en vigor sin proporcionar una explicación sobre la decisión ni abordar su posible inconstitucionalidad. Se espera que se lleve a cabo una audiencia completa en el futuro. Más de 20 estados han adoptado leyes similares para prohibir ciertos tratamientos de afirmación de género en menores, aunque algunas de estas leyes aún no han entrado en vigor o han sido suspendidas por los tribunales. La ley de Texas impide que los menores transgénero accedan a terapias hormonales, bloqueadores de la pubertad y cirugías de transición, aunque los expertos médicos sostienen que estas intervenciones quirúrgicas son poco comunes en niños. Aquellos menores que ya habían comenzado a recibir estos tratamientos deberán suspenderlos de acuerdo a las indicaciones médicas establecidas por la ley. "Los niños de Texas están hoy más seguros gracias a la decisión de la Corte Suprema", afirmó Jonathan Covey, director de políticas de Texas Values, un grupo conservador que respalda la ley. "Proteger a los niños de las dañinas y peligrosas cirugías de transición de género y de los bloqueadores de la pubertad es lo mejor para el niño y es algo en lo que todos estamos de acuerdo". La demanda presentada argumentó que la ley de Texas tendrá consecuencias devastadoras para los adolescentes transgénero si se les niega el tratamiento crítico recomendado por sus médicos y padres. Varios médicos que tratan a niños transgénero expresaron su preocupación de que sus pacientes sufran un deterioro en su salud mental, lo que podría llevar a situaciones de suicidio si se les niega un tratamiento seguro y efectivo. La prohibición de Texas fue promulgada en junio por el gobernador republicano Greg Abbott, quien fue el primer gobernador en Estados Unidos en ordenar la investigación de familias con menores transgénero que reciben atención de afirmación de género.