Agencias / La Voz de Michoacán Reino Unido. Gabrielle, una mujer de Twickenham (Reino Unido), se llevó recientemente una sorpresa desagradable en un KFC local donde pidió una bolsa de alitas fritas, en cuyo interior descubrió que había otras partes del pollo menos apetitosas. En concreto, una cabeza entera con pico y ojos, rebozada con la famosa masa frita de la cadena de comida rápida. Gabrielle publicó una foto de la cabeza en la cuenta de Instagram @takeawaytrauma y dejó una reseña de 2 estrellas en el sitio web JustEat. Los usuarios de las redes no tardaron en reaccionar a la foto, algunos con humor y otros con asco e indignación. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Takeaway Trauma (@takeawaytrauma) "Al menos sabes que (el pollo) es real", bromeó una persona. "Realmente desearía poder retroceder 2 minutos en el tiempo cuando aún no había visto esto", escribió otra. "Si no puedes soportar que tu comida sea un animal muerto, entonces no deberías estar comiendo carne", le recriminó otro usuario a Gabrielle. Por su parte, los representantes de KFC le dijeron a The Sun que estaban "realmente sorprendidos por esta foto" y que están investigando cómo pudo haber ocurrido. "En pocas palabras, servimos pollo real, y estamos orgullosos de eso, pero esto claramente se ha escapado de los estrictos procesos y controles establecidos con nuestros proveedores, socios y equipos, que preparan todo en el momento en nuestros restaurantes", señalaron. Asimismo, anunciaron que ya han "puesto en marcha más medidas" con sus proveedores y han vuelto a capacitar a sus equipos para evitar que algo así vuelva a suceder.