El chemsex es una práctica que se está poniendo de moda en España, especialmente en la comunidad gay, donde un grupo de personas se reúnen en una casa o espacios privados para drogarse y así mantener relaciones sexuales bajo los efectos de las sustancias. Energy Control es un proyecto de Asociación Bienestar y Desarrollo, y ellos fueron los que descubrieron estas fiestas que ocurren durante el fin de semana y las drogas más utilizadas son mefedrona, flakka, cristal, éxtasis y cocaína, en su mayoría todas son sintéticas, por lo que sus efectos son más fuertes y más dañinos. La mefedrona y la flakka provienen de una planta llamada cata edulis, pero es modificada sintéticamente para que sus efectos estimulantes sean mayores. Su uso aumento en 2008 y ganó popularidad pues sus efectos son menores a comparación de otras sustancias. Normalmente lo que produce es euforia, mayor energía, estado de alerta, muchas ganas de hablar, mayor habilidad mental, percepción de la música, disminución sentimientos hostiles y aumento en el deseo sexual. Por su parte, la flakka, aumentó su consumo en 2011, al ser más barata que la cocaína y con los mismos efectos de euforia, estimulación mental, más energía, pensamiento creativo, productividad y por supuesto, la excitación sexual; por lo que es utilizada en estas fiestas de “sexo y drogas”.