Agencias / La Voz de Michoacán. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró hoy que firmará una ley que prohiba la adopción de niños rusos por parejas homosexuales extranjeras, ante la creciente legalización del matrimonio gay en Europa. En conferencia de prensa, después de inaugurar la cumbre Rusia-UE (Unión Europea) en Ekaterimburgo, ciudad en los Montes Urales, Putin fue cuestionado sobre el proyecto de ley que se prepara para restringir las adopciones a parejas del mismo sexo. El líder ruso dijo no haber leído la iniciativa, pero aseguró que si ésta es aprobada por el Parlamento, "la voy a firmar, sin duda", de acuerdo con despachos de la agencia local de noticias RIA Novosti. Alexei Levchenko, asistente de Olga Golodets, viceprimera ministra rusa de Asuntos Sociales, anunció la semana pasada que estaba en elaboración una enmienda para prohibir que niños rusos sean adoptados por matrimonios gay. En ese sentido, el defensor de los derechos de los niños de Rusia, Pavel Astakhov, afirmó que Moscú debería imponer una moratoria a las adopciones por ciudadanos franceses ahora que París permite a los homosexuales casarse y adoptar menores. Existe un acuerdo ruso-francés en materia de adopciones, pero debe reconsiderarse porque la aprobación del matrimonio gay en Francia contradice directamente a la legislación rusa, dijo Astakhov. El pasado 18 de mayo, el presidente francés Francois Hollande firmó la llamada ley "matrimonio para todos", con lo que Francia se convirtió en el noveno país europeo en legalizar las uniones homosexuales, pese a las masivas protestas que provocó. El presidente ya había advertido el mes pasado que Rusia podría cambiar sus acuerdos de adopción con los países que permiten el matrimonio sexual, pues ello "va en contra de los valores tradicionales rusos". La homosexualidad sólo fue despenalizada en Rusia en 1993, pero el sentimiento antigay continúa siendo fuerte en la sociedad, incluso entre la clase política del país. En 2007, el ex alcalde de Moscú, Yury Luzhkov, describió los intentos de celebrar una marcha de homosexuales en la capital como "satánico". La prohibición de difundir "propaganda gay" entre los menores de edad, actualmente en revisión en la legislatura rusa, prevé multas de entre cuatro mil y 500 mil rublos (entre 130 y 16 mil 500 dólares) para los individuos y organizaciones que la promuevan.