El secretario de Transportes de Francia, Alain Vidalies, anunció hoy que París analizará con varios de sus países vecinos el reforzamiento de la seguridad en los trenes con el fin de prevenir nuevos ataques como el del viernes pasado. En declaraciones a radios locales, Vidalies indicó que “en los próximos días” autoridades francesas mantendrán reuniones con representantes de otros países europeos para tomar “nuevas medidas” que permitan mejorar la seguridad de los trenes internacionales. En los encuentros participarán delegados de los gobiernos de Alemania, Bélgica y Alemania, los tres países con los que Francia está enlazado por trenes de alta velocidad “Thalys”, el tipo de tren que fue atacado el viernes pasado por un presunto yihadista. Los hechos ocurrieron el viernes por la tarde durante el recorrido por Bélgica de un tren de alta velocidad “Thalys” que viajaba entre Amsterdam y París. Fuentes oficiales reportaron que un marroquí, Ayoub El Khazzani, fichado por terrorismo y que habría viajado a Siria, disparó e hirió a tres pasajeros. El hombre viajaba con un fusil Ak-47 y con varias armas más y fue reducido por un grupo de tres marines que viajaba de vacaciones en el tren. El responsable de la cartera de Transportes del gobierno galo precisó por otro lado que a partir de este ataque frustrado aumentarán “los controles aleatorios de los equipajes” de los pasajeros de los trenes franceses. Añadió que Francia creará un número de teléfono para que los pasajeros de los trenes puedan reportar eventuales amenazas o incidencias relacionadas con la seguridad. Pero consideró inaplicable adoptar medidas como el control de pasajeros y equipajes similares a las del sector aéreo porque el volumen de viajeros es mucho mayor. "No se puede trasplantar lo que se hace en el transporte aéreo”, subrayó Alain Vidalies al recordar que cada año en Francia viajan dos mil millones de pasajeros por 140 millones que toman el avión.