EFE / La Voz de Michoacán Guatemala. Las autoridades guatemaltecas esperan este viernes la repatriación de los cuerpos de los 16 migrantes asesinados en Tamaulipas, México, el pasado 22 de enero, según confirmó la Cancillería. La repatriación fue acordada el pasado 12 de marzo por los gobiernos de México y Guatemala luego de terminar el proceso de identificación de las víctimas, de acuerdo al Ministerio de Relaciones Exteriores. Según detalló la Cancillería a periodistas, el vuelo que transportará los restos de los 16 migrantes guatemaltecos, asesinados y quemados por desconocidos en el municipio de Camargo, arribará a Ciudad de Guatemala a primera hora del viernes. Foto: EFE. Las autoridades anunciaron que los 16 cuerpos serán puestos en capilla ardiente antes de que los entreguen en un acto oficial a sus familiares, y luego saldrán las carrozas fúnebres que trasladarán los restos hacia sus lugares de origen, acompañados de agentes de la Policía Nacional Civil (PNC). La mayoría de los migrantes eran originarios de Comitancillo, un poblado guatemalteco ubicado en el departamento suroccidental de San Marcos, fronterizo con México. Foto: EFE. En una declaración conjunta firmada el pasado 6 de marzo, los gobiernos de los dos países se comprometieron a cumplir con los protocolos de honras fúnebres y dar apoyo y acompañamiento psicológico a los familiares de las víctimas. Además de los 16 guatemaltecos calcinados, también se hallaron los cuerpos de tres migrantes mexicanos, para un total de 19 cuerpos en una camioneta en el poblado de Santa Anita, del municipio de Camargo, Tamaulipas, fronterizo con Texas (Estados Unidos). Según los testimonios, un comando de pistoleros del Cartel del Noreste (CDN), los antiguos Zetas, ingresó al lugar para buscar un mando del grupo rival, el Cartel del Golfo (CDG), la organización criminal que controla la zona en Tamaulipas. Pero luego de un enfrentamiento, los sicarios del CDN encontraron a las 19 personas y los asesinaron. Ambos grupos, según las autoridades mexicanas, mantienen una disputa por el control de los estados del noreste de México desde marzo del 2010, conflicto que ha provocado desde esa fecha más de 15.000 desaparecidos y miles de muertes. La masacre avivó en México el trágico recuerdo del asesinato en 2010 y en la misma región en el que 72 migrantes, 58 hombres y 14 mujeres, fueron asesinados y sus restos abandonados a la intemperie.