Notimex/ La Voz de Michoacán Kabul. Hombres armados asaltaron hoy la sede de la Autoridad Nacional para Personas con Discapacidades de Afganistán, en esta capital, y retuvieron a decenas de empleados, provocando enfrentamientos con las fuerzas de seguridad que siguen hasta cerca de la medianoche. El comando armado irrumpió alrededor de las 15:00 horas locales en el edificio gubernamental, ubicado en el centro de Kabul, luego de detonar un coche bomba frente al Ministerio de Obras Públicas, que se encuentra a unos metros de distancia. https://twitter.com/NTN24/status/1077284707753213953 “Los atacantes detonaron un coche bomba frente al Ministerio de Obras Públicas y luego iniciaron disparos y entraron en el edificio de la Autoridad Nacional para Personas con Discapacidades y Familias de Mártires”, informó Nusrat Rahimi, portavoz adjunto del Ministerio del Interior (MoI). El funcionario confirmó casi siete horas después del ataque al edificio del gobierno que un policía y tres atacantes murieron y otras seis personas resultaron heridas, entre ellos tres uniformados, aunque los enfrentamientos seguían, según un reporte de la agencia informativa PAN. Rahimi dijo que 200 empleados de la Autoridad Nacional para Personas con Discapacidades y Familias de Mártires fueron rescatados en medio de los enfrentamientos, aunque "una gran cantidad de empleados todavía están dentro del edificio". https://twitter.com/AFPespanol/status/1077289054666780672 Testigos informaron que la explosión del coche bomba y el asalto armado ocurrió justo antes de que el personal saliera de sus oficinas en otro día de trabajo y que un incendio envolvió el edificio, rodeados de varios edificios de apartamentos. Un funcionario del Ministerio de Obras Públicas dijo que hasta después de las 21:00 horas locales seguía el intercambio de disparos entre las fuerzas de seguridad y los asaltantes, quienes tendrían como rehenes a más de 200 trabajadores públicos. La emisora Tolo News informó que cerca de la medianoche seguían los enfrentamientos, a pocos kilómetros de la llamada “zona verde”, donde se encuentran las oficinas del gobierno afgano y las embajadas extranjeras. El ataque es el más grande en Kabul desde el 28 de noviembre pasado, cuando insurgentes talibanes detonaron un coche-bomba fuera del recinto de la firma de seguridad británica G4S, matando al menos a 10 personas y dejando un enorme cráter en el pavimento. Por ahora, ningún grupo se ha responsabilizado del asalto armado, aunque la Policía de Kabul aseguró que lleva el sello del movimiento fundamentalista armado. El Movimiento Talibán, que proclama el extremismo religioso islámico, llegó al poder en Afganistán en 1996, bajo la imposición de una de las más estrictas interpretaciones de la Sharia (Ley Islámica), que ganó mala fama a nivel internacional por el maltrato a las mujeres. El régimen fue derrocado tras la invasión de Estados Unidos a fines de 2001, luego de los atentados del 11 de septiembre de ese año contra las Torres Gemelas, orquestado por el fallecido líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, quien en ese entonces se refugiaba en Afganistán, protegido por el Talibán.