La tregua humanitaria unilateral de Israel en la Franja de Gaza, salvo Rafah, entró en su parte final con acusaciones palestinas de violación israelí, mientras el canciller Avigdor Liberman se pronunció por un mandato de la ONU en el área. La tregua anunciada anoche y que inició a las 10:00 horas (7:00 GMT) de este lunes comenzó su parte final con la denuncia palestina de un bombardeo al campo de refugiados de Shati, en el norte de la Franja. El ministro palestino de Salud, Ashraf al-Qudra, dijo que el ataque sucedió "casi de inmediato" tras el inicio de la tregua, y dejó 30 heridos, en su mayoría mujeres y niños, reportó el canal de noticias Al Yazira. En tanto, el canciller israelí Liberman se pronunció por que Naciones Unidas controle Gaza y recordó la gestión que en la sureña región serbia de Kosovo, de mayoría albanesa, realizó la ONU. Ante los miembros del comité parlamentario de Asuntos Extranjeros y Defensa explicó que con Gaza existen tres opciones: destruir al movimiento Hamás, lograr un acuerdo diplomático o caer en un limbo donde "los palestinos disparen cohetes y los israelíes respondamos". Explicó que si Israel destruye a Hamás la gestión de la ONU de Gaza sería una opción seria, llamó a no rechazar esa opción y aceptar que el regreso a las fronteras que existían antes de la guerra de 1967 no traerá paz ni estabilidad por sí sola. Empero, el parlamentario laborista Nachman Shai dijo que esa propuesta "pertenece a otro mundo", e insistió en que el actual gobierno israelí vaya hacia la solución de dos estados, que es la que apoya la comunidad internacional, indicó la versión electrónica del Jerusalem Post.