Notimex/La Voz de Michoacán París. El considerado líder del grupo de los “chalecos amarillos”, Eric Drouet, fue liberado hoy tras ser detenido la víspera en una manifestación con un arma ilegal, según la policía, pero será juzgado por varias acusaciones en su contra, reportaron hoy fuentes judiciales. De acuerdo con las fuentes, Drouet compareció este domingo ante un juez que lo liberó, pero lo citó el 5 de junio del año próximo para ser juzgado por una corte correccional. Según su abogado, Khéops Lara, Drouet está “sereno y confiado” en que será exculpado de los cargos de los que fue acusado y el juez del caso decidió no impedirle manifestarse próximamente en París. De acuerdo con fuentes policiales, Drouet fue arrestado durante la protesta acusado de “portar un arma prohibida”, presuntamente una macana, y de “organización ilícita de manifestación”. El abogado explicó, sin embargo, que se trataba de una barra de madera que un familiar le regaló para protegerse en caso de ser atacado en carretera, porque es camionero de profesión. El abogado denunció además a medios locales que el fiscal del caso quería en realidad evitar que siguiera manifestándose “pacíficamente” y continuar con el movimiento social. Drouet fue detenido la víspera en París, durante las sextas manifestaciones celebradas en la capital francesa contra los altos impuestos y para pedir un aumento del nivel adquisitivo de los franceses. Drouet es considerado uno de los líderes más carismáticos y conocidos del movimiento ciudadano "popular y apolítico", que comenzó a manifestarse en Francia el 17 de noviembre pasado y que ha provocado la mayor crisis de gobierno del presidente Emmanuel Macron. Está considerado también como el autor del llamado al “bloqueo nacional contra la subida de los combustibles”, con el que comenzó la oleada de manifestaciones del pasado 17 de noviembre que congregó a más de 200 mil personas en toda Francia. El pasado 7 de diciembre la Fiscalía de París ya había abierto una investigación contra Drouet por “provocación a la comisión de un crimen y de un delito”, luego de que el líder del movimiento llamara a los "chalecos amarillos" a invadir el Palacio presidencial francés del Elíseo en una entrevista en televisión.