Notimex/La Voz de Michoacán Washington, EUA. Más de seis de cada 10 estadounidenses coinciden que ni el presidente Donald Trump ni el Congreso están haciendo lo suficiente para prevenir masacres con armas de fuego como la ocurrida la semana pasada en Florida, señaló hoy un nuevo sondeo del diario Washington post y la cadena ABC. La encuesta, realizada después de que el adolescente Nikolás Cruz masacró a 17 estudiantes y maestros en la escuela preparatoria Marjory Stoneman Douglas, mostró que un 58 por ciento de los adultos creen que leyes más estrictas de control de armas habrían prevenido la masacre. Sin embargo, la encuesta muestra que el debate sobre la reforma de las leyes para el control de las armas sigue siendo divisivo y polarizante para los estadunidenses. A pesar de la sucesión de ataques multitudinarios en los últimos años, la proporción de estadunidenses adultos que apoyan una prohibición de las armas de asalto continúa sin cambios y sólo cuatro de cada 10 respaldan la idea de la Secretaría de Educación, Betsy DeVoz, de permitir que los maestros porten armas de fuego. La encuesta muestra que el Congreso es visto por la mayoría de los estadunidenses como el principal obstáculo para aprobar políticas que eviten la repetición de masacre similares a la de Florida. Un 77 por ciento de la población de Estados Unidos cree que el legislativo no está haciendo lo suficiente. En el caso de la responsabilidad del presidente Donald Trump, ocho de cada 10 demócratas y dos terceras partes de los independientes creen que no está haciendo lo suficiente para prevenir la violencia de las armas. Sin embargo, seis de cada 10 estadunidenses que se identifican como votantes republicanos consideran que el presidente si está haciendo lo suficiente, y sólo un 28 por ciento cree que debe hacer más alrededor del tema. Trump ha sido criticado duramente por legisladores demócratas y organizaciones progresistas por evitar profundizar en el debate sobre el control de armas de fuego cuando ocurren tragedias similares a la de Florida. Pero la Casa Blanca dijo ayer, por primera vez, que el presidente Trump está abierto a considerar cambios en las leyes de verificación de antecedentes para comprar armas de fuego. Trump habló por separado con el senador republicano, John Cornyn y el demócrata Chris Murphy, autores de una propuesta federal para mejorar el sistema de verificación de antecedentes, presentada tras la masacre en Sutherland Spring, Texas, que dejó 26 muertos. Aunque las discusiones continúan y se están considerando revisiones, el presidente apoya los esfuerzos para mejorar el sistema federal de verificación de antecedentes”, dijo la vocera presidencial, Sarah Sanders.