El Papa Francisco ordenó aplicar la medida cautelar del arresto domiciliario contra Jozef Wesolowski, ex nuncio apostólico (embajador vaticano) en la República Dominicana acusado de abusos sexuales contra menores. El portavoz de la sede católica, Federico Lombardi, confirmó que el prelado fue detenido y permanecerá restringido de su libertad dentro del territorio vaticano, en tanto avanza la investigación penal en los juzgados civiles del Estado Pontificio. Se trata de la primera vez que se aplica una medida de este tipo contra un clérigo, aunque en el pasado había permanecido arrestado un empleado papal no religioso, Paolo Gabriele, mayordomo de Benedicto XVI, culpable de robar y difundir documentos confidenciales en el escándalo conocido como “vatileaks”. Según estableció Lombardi, el promotor de justicia (fiscal) del Tribunal de primera instancia del Estado de la Ciudad del Vaticano convocó a Wesolowski para informarle sobre las imputaciones del procedimiento penal en su contra por “graves hechos de abuso en daño de menores” sucedidos en la República Dominicana. “La gravedad de los hechos indujeron a la oficina investigadora a disponer un procedimiento restrictivo que, a la luz de la situación sanitaria del imputado, comprobada por la documentación médica, consiste en el arresto domiciliario, con las relacionadas limitaciones, en locales dentro del Estado de la Ciudad del Vaticano”, sostuvo. “La iniciativa asumida por los órganos judiciales del Estado son consecuencia de la voluntad expresa del Papa, para que un caso tan grave y delicado sea afrontado sin retardos, con el justo y necesario rigor, con asunción plena de responsabilidad de parte de las instituciones de la Santa Sede”, agregó. El caso no tiene precedentes. Explotó en agosto de 2013 cuando el entonces representante vaticano fue convocado de imprevisto a Roma.