Miles de escuelas en los distritos más golpeados por los dos terremotos en Nepal reabrieron las aulas el domingo. La mayoría de los edificios resultaron dañados o no son seguros, de modo que las clases se celebran en aulas temporales encargadas por el Ministerio de Educación. Los terremotos del 25 de abril y el 12 de mayo mataron a 8.693 personas e hirieron a 22.221. Se calcula que más del 90% de las escuelas quedaron destruidas en los distritos más afectados de Gorkha, Sindhpalchok y Nuwakot. Casi 24.000 aulas resultaron dañadas o destruidas. La gran tasa de abandono escolar ya era un motivo de preocupación antes de los temblores, señaló UNICEF. Unos 1,2 millones de niños de entre 5 y 16 años nunca han ido a la escuela o la han abandonado. Niraj Kayanstha, profesora en la escuela de Changuranayan, al este de Katmandú, dijo a la emisora estatal Radio Nepal que en torno a la mitad de los 400 alumnos del centro habían ido a clase el domingo. Ese día no estudiaron, sino que bailaron, cantaron y hablaron con los profesores sobre sus experiencias tras los terremotos. El gobierno envió inspectores a las escuelas, con pegatinas verdes y rojas para indicar si los edificios son seguros.