Cuba. En La Habana, las nuevas disposiciones de Trump fueron contestadas en un sobrio comunicado por parte del gobierno, que rechazó la “retórica hostil” del mandatario estadounidense y reiteró su interés de un “diálogo respetuoso”. “Nuevamente el gobierno de los Estados Unidos recurre a métodos coercitivos del pasado, al adoptar medidas de recrudecimiento del bloqueo, en vigor desde febrero de 1962”, dijo el gobierno cubano a través de los medios de comunicación estatales. A la par refutó que las medidas dispuestas por Trump sirvan para impulsar una mejora en las libertades civiles en la isla. “Cualquier estrategia dirigida a cambiar el sistema político, económico y social en Cuba, ya sea la que pretenda lograrlo a través de presiones e imposiciones, o empleando métodos más sutiles, estará condenada al fracaso”, agregó el comunicado. Trump dijo que las sanciones sobre Cuba permanecerían vigentes hasta que el gobierno isleño libere a los presos políticos, deje de reprimir a los disidentes y respete la libertad de expresión.