AP / La Voz de Michoacán Londres. El acuerdo establecido por la primer ministra de Inglaterra, Theresa May, para pasar el llamado "Brexit" fue rechazado, lo cuál pronostica una situación caótica tanto para Inglaterra como para la Unión Europea. Lo que comenzó como una disputa interna del Partido Conservador condujo al referendo de junio de 2016 y se extendió hasta provocar una división enconada en la sociedad británica y el Parlamento. El Parlamento británico debatía el miércoles una moción de censura contra el gobierno de la primera ministra Theresa May, un día después de rechazar el acuerdo para el Brexit por un margen histórico. El líder laborista Jeremy Corbyn declaró que el gobierno “debe hacer lo correcto y renunciar”. Añadió: “Si un gobierno no puede hacer que el Parlamento apruebe sus leyes, debe volver al pueblo en busca de un nuevo mandato. May intentará mantener su cargo luego de poner en juego su reputación en un esfuerzo de última hora para lograr apoyos al acuerdo de divorcio que negoció con la Unión Europea. Aunque la derrota era esperada, su escala _ 432 votos frente a 202 _ fue devastadora para el liderazgo de May. El día de la votación, Corbyn presentó una moción de censura diciendo que daría al Parlamento la oportunidad de dar su veredicto “sobre la absoluta incompetencia de este gobierno”. La Unión Europea está preocupada Tras el humillante revés que sufrió el gobierno de May, el negociador del Brexit para la UE, Michel Barnier, dijo por la madrugada que el bloque “teme más que nunca el riesgo” de una salida caótica. Los líderes de la Unión Europea rogaban al Reino Unido el miércoles que resolviera sus conflictos internos y elaborase un plan realista para su salida del bloque, cuando han pasado más de dos años desde que los británicos votaron por el Brexit, que debe consumarse en apenas 10 semanas. Entre atónitos y desconcertados, los políticos europeos contemplaron cómo el Parlamento británico rechazaba el acuerdo para el Brexit logrado con la primera ministra Theresa May y le infligían a su gobierno una derrota histórica el martes por la noche. Y a pesar de la urgencia y lo crucial que sería lograr una salida ordenada con un largo período de transición y una serie de medidas complementarias, las divisiones no dejan de aumentar. El Brexit es una desgracia para el pueblo británico y la UE. Nadie gana. Todos perdemos, el pueblo británico en particular”, dijo el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, en el parlamento en Estrasburgo. May tendrá que decidir si negociar o salir sin acuerdo May tiene ante sí una dura elección: decantarse por una ruptura drástica sin un acuerdo sobre la relación futura con Bruselas o intentar una salida más suave. Mientras, legisladores tanto del gobierno como de la oposición están intentando arrebatar el control del Brexit a un ejecutivo paralizado para que los diputados puedan dirigir directamente la planificación del proceso. Pero sin una mayoría clara para una alternativa concreta, existe una posibilidad cada vez mayor de que Londres pueda intentar demorar la fecha tope mientras los políticos trabajan en un nuevo plan, o incluso devolver la pelota a los votantes convocando un nuevo referéndum sobre la permanencia en el bloque. Los líderes europeos se están preparando para lo peor. La Unión Europea intensificó los preparativos para un Brexit sin acuerdo tras la votación de Londres, dijo antes el miércoles el negociador comunitario, Michel Barnier. Bruselas “teme más que nunca que exista un riesgo” de salida caótica.