Notimex/ La Voz de Michoacán Teherán. Los gobiernos de Irán y de Estados Unidos intercambiaron hoy prisioneros, un profesor iraní y un estudiante estadounidense, en una acción sorpresiva en medio de las sanciones que Washington impuso a la República Islámica por el programa nuclear. Se trata del especialista iraní en células madre, Masud Soleimani, quien hace un año llevaba a cabo un trabajo de investigación en la Clínica Mayo de Minnesota, pero fue detenido sin cargo alguno por agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés). La cancillería de la República islámica indicó que el especialista fue liberado después de permanecer un año en prisión, ante representantes de la Dirección General para América y el portavoz del Ministerio iraní de Exteriores, informó la agencia IRNA. El canciller iraní Mohamad Yavad Zarif señaló, en su perfil de la red social de Twitter: "Me alegra que el profesor Masud Soleimani y el Sr. Xiyue Wang puedan reunirse en breve con sus familias. Muchas gracias a todos los que han colaborado, particularmente al gobierno suizo". Mientras tanto, el estudiante chinoestadounidense de doctorado de la Universidad de Princeton Xiyue Wang, quien realizaba una investigación en Teherán, fue detenido hace tres años acusado de espionaje y recluido en la prisión Evin de Irán, indicó a su vez la cadena CNN. Wang, quien estaba sentenciado a 10 años de prisión, al quedar en libertad fue llevado a un hospital estadounidense ubicado en Alemania, donde se le realiza una revisión médica, para después trasladarlo hacia el país americano. El presidente Donald Trump comentó que está contento por tener al ciudadano estadounidense de vuelta y de que este intercambio, uno por uno, también es una buena noticia para Irán, lo que demuestra que se pueden hacer cosas, reportó el canal euronews. El año pasado, con el argumento de que Irán seguía desarrollando armas nucleares, Estados Unidos rompió el Plan de Acción Integral Conjunto, firmado en 2015 y el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, el Reino Unido, Francia y Alemania) y empezó a imponer sanciones a la República Islámica. Además, Washington rechazó los informes del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que le confirmaron que Teherán si cumplía los acuerdos referidos. En mayo de 2019, Irán comenzó a recortar de manera gradual el cumplimiento de sus compromisos nucleares ante la falta de avance del resto de países signatarios para contrarrestar las restricciones. De esa forma, la República Islámica superó su stock permitido de 300 kilogramos de uranio enriquecido y luego comenzó a enriquecer a valores por encima del 3.67 por ciento de uranio-235.