Notimex / La Voz de Michoacán. El Papa Francisco tomó hoy posesión de la cátedra de obispo de Roma, de la que es titular como jefe de la Iglesia católica, en una ceremonia celebrada en la basílica de San Juan de Letrán. "Con alegría celebro por primera vez la Eucaristía en esta basílica lateranense, catedral del obispo de Roma", declaró el pontífice a los fieles presentes. Poco antes, en torno a las 17:00 horas locales (15:00 GMT), el Papa inauguró una plaza adyacente a nombre de Juan Pablo II. En el acto estuvo acompañado por el alcalde de Roma, Gianni Alemanno, que develó una placa dedicada al Papa polaco, el cardenal vicario de Roma, Agostino Vallini, y el vicario emérito Camillo Ruini. En la homilía Francisco dijo que "son muchas las propuestas mundanas que oímos a nuestro alrededor, pero dejémonos aferrar por la propuesta de Dios, la suya es una caricia de amor". "Para Dios no somos números, somos importantes, es más, somos lo más importante que él ha creado, aunque seamos pecadores", agregó. El Papa volvió a hablar de la paciencia, pues, dijo, "quien ama comprende, espera, da confianza, no abandona, no corta los puentes". "Dios es paciente con nosotros porque nos ama. Dios siempre espera, no se cansa. Durante mi vida personal he visto muchas veces el rostro misericordioso de Dios, su paciencia", afirmó. Por la mañana el Papa Francisco celebró desde el balcón de su estudio el rezo del "Regina Coeli", que en el tiempo de Pascua sustituye al Angelus, que concluyó llamando a "no tener miedo de ser cristianos y de vivir como cristianos". Ante miles de personas reunidas en la plaza de San Pedro, el jefe de la Iglesia católica dijo que "la Iglesia es mandad por Cristo resucitado a transmitir a los hombres la remisión de los pecados para así hacer crecer el reino del amor".