UE abrirá más campos para refugiados

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

Los ministros del Interior de la Unión Europea (UE) acordaron hoy abrir campos de refugiados en Italia, Grecia y en los países vecinos, además de acelerar la deportación de migrantes económicos, como medio de solucionar la actual crisis.

La idea es garantizar la aplicación de la convención de Dublín, según la cual los recién llegados a la UE deben ser identificados y registrados, incluidas sus huellas digitales, en el país europeo al que llegan, donde deben permanecer mientras se procese su solicitud.

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La normativa no está siendo respetada actualmente, en parte porque Alemania había decidido hacer excepción delante de la gravedad de la situación en Grecia y Hungría, donde miles de refugiados y migrantes siguen durmiendo en las calles a la espera de poder registrarse.

La decisión fue tomada en reunión extraordinaria en Bruselas, en tanto Austria, República Checa y Eslovaquia reintrodujeron sus controles fronterizos, y a pocas horas de que entre en vigor en Hungría una nueva ley que penaliza el cruce ilegal de sus fronteras.

El domingo, Alemania, principal destino de los migrantes que buscan asilo en la UE, fue el primer país en anunciar un cierre temporal de fronteras para controlar un flujo sin precedentes, que no cesaba de aumentar.

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Para que la convención de Dublín pueda ser aplicada de manera efectiva, Los Veintiocho decidieron organizar en Grecia e Italia “centros de recepción temporal” para acomodar a los migrantes durante el tiempo que tarde sus procedimientos de asilo.

Al mismo tiempo, esos países contarán con refuerzo para registrar a los recién llegados y procesar “rápidamente” los pedidos, así como deportar, con celeridad, a las personas que no tengan derecho al asilo.

“Es crucial que mecanismos robustos estén operativos inmediatamente en Italia y Grecia para (...) identificar a las personas que necesitan protección internacional y apoyar su reubicación y, a la vez, para identificar a los migrantes irregulares que deben ser deportados”, sostuvieron los ministros al final de la cita.

Todo aquello que tenga denegado su pedido de asilo estará sujeto a detención de no aceptar regresar voluntariamente a su país de origen, afirma el documento.

A mediano plazo, los ministros defienden que la UE abra nuevos campos de refugiados fuera de su territorio, en países considerados seguros, hacia donde podrían enviar a quienes deniegue el asilo.

Los Veintiocho también pidieron a la Comisión Europea (CE) “avanzar” en la lista común de países de origen seguros, cuyos nacionales no tendrán en principio derecho al asilo y, por lo tanto, podrán ser deportados.

Dicha lista incluirá a todos los países de los Balcanes, pero no a Turquía, pese a ser un país candidato a la adhesión de la UE.

Respecto a la propuesta de Bruselas de repartir 120 mil refugiados actualmente ubicados en Hungría, Grecia e Italia, los ministros se limitaron a manifestar su “compromiso” con la idea, que deberá “servir de base” para un acuerdo que no se adoptará antes de octubre.

Según el ministro de Asuntos Exteriores de Luxemburgo, Jean Asselborn, cuyo país ejerce la presidencia semestral de la UE, “no todos los países apoyan” el plan, pese a los esfuerzos de Bruselas por convencer a los más reticentes.

“Hay un acuerdo de principio apoyado por la gran mayoría. Creo que en la cabeza de algunos colegas, quizás de algunas poblaciones, hace falta darle algún tiempo para que reflexionen”, afirmó.

“Estoy seguro de que incluso un pequeño país como Luxemburgo puede acoger algunas centenas de personas que no son de religión cristiana, que tienen otro color de piel. Ese miedo tiene que ser vencido. En algunos países, aún no se ha llegado a ese punto, pero les ayudaremos”, añadió Asselborn.