Claudia Luna Palencia Todavía en 2022 caminar por la noche en España –sea una persona sola o acompañada– no es tan peligroso como en otros países, por ejemplo, en México, Estados Unidos, Colombia o Irak. Aunque claro hay ciudades como Barcelona que en los últimos años encabeza la tasa delictiva en el país ibérico y la situación ha ido de mal en peor bajo el govern de Ada Colau. La percepción de la inseguridad puede ser muy relativa dependiendo de la opinión del ciudadano y de cómo le vaya en la calle; la inseguridad porque te arrebaten el bolso no es igual a que una persona salga de fiesta y termine violada. En los últimos años, las violaciones en España han sido especialmente llamativas porque, con una recurrencia extraña, han sido llevadas a cabo por grupos de jóvenes: los casos de las manadas se han ensañado con chicas que solo querían ir de fiesta y además en sitios en los que no precisamente destacan porque tengan graves problemas delictivos. El caso más sonado irrumpió en julio de 2016, durante los Sanfermines en Pamplona, una tradición taurina que atrae a miles de personas locales, nacionales y por supuesto, internacionales. En medio de tan acalorado folclore una chica de 18 años pasada de copas fue violada dentro del portal de un edificio por 5 hombres. Hay videos de por medio grabados por los propios agresores. Ese lamentable suceso ha sido un parteaguas para, casi seis años después del hecho, tener en España una nueva Ley de Garantías de Libertad Sexual, conocida popularmente como la ley del solo sí es sí. ¡Al fin ha llegado! Ha pasado por el cedazo del Congreso, como lo hizo el 25 de agosto y salió victoriosa apoyada por el ala progresista que además reivindicó una de las principales demandas de los últimos años de los colectivos feministas: no dejar impunes las violaciones y proteger la integridad de las mujeres en su sexualidad en el renglón de las relaciones consentidas. Desde que aconteció el caso de “La Manada” en Pamplona sucedieron más de cien violaciones grupales en España; solo 14 en 2019, en todos estos meses de discusión sobre la necesidad de reforzar el Código Penal y garantizar la libertad sexual. Los jueces que juzgaron a los delincuentes de los Sanfermines los condenaron por abuso sexual y la gente se echó a la calle en grandes y masivas protestas exigiendo que fueran condenados por violación que son más años de prisión. Mucho escarnio se hizo durante largos y largos meses acerca de la actitud asumida por la joven durante la violación perpetrada, repito, por cinco hombres en el portal de un edificio al caer del alba. La sociedad desde su óptica siempre machista quiere alzar sus piedras para lapidar a las mujeres hasta porque son violadas ya sea porque van borrachas o son provocadoras o llevan minifalda. A colación La ley del solo sí es sí en España establece que toda relación sexual deberá ser consentida, las partes deberán manifestarlo abiertamente afirmando que están dispuestas por voluntad propia, sin ningún tipo de amenaza o coacción, a realizar el acto. La omisión de dicha afirmación expresa y clara de la voluntad de aceptar tener relaciones sexuales se entenderá por los jueces, si existiese alguna demanda pertinente, como una violación. Del Código Penal también se elimina el término del abuso sexual para reconocer solo las agresiones sexuales e impedir así que los delincuentes sexuales puedan beneficiarse de penas de prisión más suaves. Esta ley es un triunfo sobre todo para Unidas Podemos, el grupo de izquierda radical aliado del PSOE en el gobierno y que permite que el mandatario socialista, Pedro Sánchez, tenga un Ejecutivo de coalición. La ministra de Igualdad, Irene Montero, pertenece a Unidas Podemos y es una de las impulsoras de esta novedosa legislación, pionera en España y en el mundo. No se conoce en otro país que sea necesario expresar el consentimiento abierto y explícito, para dejar muy claro, que la persona está dispuesta a tener una relación sexual. A decir verdad, es una ley muy interesante y amplia que para los estudiosos de la materia valdría la pena leer a fondo. @claudialunapale