Etelberto Cruz Loeza Es sumamente lamentable lo que pasó en una franja de nuestro país. Esa franja del eje volcánico que cubre el occidente hasta el sur de nuestro territorio – un poco más allá del Chichonal - estornudó otra vez – con el 7.2 de graduación -, ahora el cumplirse el 32° aniversario del cataclismo de 1985 y puso a temblar a todo el centro de nuestra patria. Su dramática estela deja una cantidad de muertos que supera los 300, más de 200 desaparecidos y daños materiales incuantificables por el momento, en su ruta volcánico, hasta salir del país. La sociedad nacional se estaba normalizando, superando el estupor o aceptando lo inevitable del siniestro natural del pasado 7 del presente y ahora esto. Parece que la naturaleza no nos quiere soltar. Somos uno de sus juguetes preferidos. Es desconsolador y estremecedor ver las imágenes de lo que desploma y queda, en el piso, destruido y desparramado; particularmente, estar impedido por muchas maneras de hacer algo para detener los derrumbes. Bueno, no hay nada ni nadie que lo pueda hacer, menos predecir. Dentro del tremendismo de los sucesos, deja magnífico sabor de boca, la tan inmediata como efectiva respuesta del pueblo, que otra vez, se adelantó a las autoridades y a los supuestos líderes políticos. Resta a todos los espectadores nacionales brindar la solidaria ayuda material para paliar un poco lo terrible y desastroso del cataclismo, y queda a las autoridades políticas y gobiernos de las áreas siniestradas planear la reconstrucción, reorientar los presupuestos y estimular a los particulares para que la sociedad nacional siga de pie y continúe caminando. Se pueden decir muchas cosas, pero sería demagogia y hasta carroñero tejer imágenes verbales sobre un drama nacional. Por otro lado es deseable que no aparezcan los utilitaristas, los oportunistas, los defraudadores, las hienas=zopilotes y amorales de siempre que no tienen madre y se enriquecen y negocian con el dolor del pueblo. Únicamente lo siguiente: Orden y organización. 1° Una sola entidad nacional para recibir lo reunido por los centros de acopio y una sola entidad nacional para distribuir – por unidades sectoriales, con las cabezas de sector al frente - y haya vigilancia y supervisión. ¡No vaya a ser! 2° Desde mi óptica fue no recomendable el criterio=decisión de posponer los encuentros futbolísticos de esta jornada. Siempre prevaleciendo el respeto y la solidaridad, la sociedad nacional debe continuar su marcha y mostrar que ante el dolor se muestra solidaridad, unidad y ayuda, más también la sociedad se debe relajar, divertir y distraer. Popularmente lo único que se tiene es la televisión y sin nada en qué invertir su tiempo, lo llenarán las lamentaciones. 3° Para evitar protagonismos partidistas, es el INE la entidad que, por acuerdo de su Consejo General, debe entregar la cantidad porcentual de sus prerrogativas, más los días de sus enormes salarios de los consejeros ciudadanos y de sus favorecidos trabajadores. En estos momentos de dolor, tomo fragmentos de la oración optimista de Ramón López Velarde de su oración a la Patria Suave: Patria: tu superficie es el maíz, Tus minas el palacio del rey de Oros, y tu cielo, las garzas en desliz y el relámpago verde de los loros. El Niño Dios te escrituró un establo y los veneros de petróleo el diablo... Patria, tu mutilado territorio se viste de percal y abalorio… Tu barro suena a plata, y en tu puño su sonora miseria es alcancía; … ¡Y tu cielo nupcial, que cuando truena de deleites frenéticos nos llena! Trueno de nuestras nubes, que nos baña de locura, enloquece a la montaña, requiebra a la mujer, sana al lunático, incorpora a los muertos, pide el Viático, y al fin derrumba las madererías de Dios, sobre las tierras labrantías. Trueno de temporal: oigo en tus quejas crujir los esqueletos en parejas;… Patria, te doy de tu dicha la clave: sé siempre igual, fiel a tu espejo diario; cincuenta veces es igual el Ave taladrada en el hilo del rosario, y es más feliz que tú, Patria suave… Sé igual y fiel… Cambiando de giro, se inició, formalmente, el calendario escolar que normará la elección federal, constitucional, del 2018, en la que estarán en disputa cerca de 3,300 puestos de elección popular, desde regidurías, sindicaturas, presidentes municipales de los H. Ayuntamientos, diputados a los H. Congresos locales, diputados y senadores de la República al H. Congreso de la Unión, titulares de 8 poderes Ejecutivos estatales, más la jefatura de la ciudad de México y la titularidad del poder Ejecutivo Federal. La sociedad tendrá el poder de darse la forma de gobierno, el gobernante y los representantes populares que su mayoritaria y soberana voluntad decida. Ojalá que nosotros, los electores, no nos equivoquemos y seamos, mayoritariamente, engañados por los discursos, las ideas fuerza, los mensajes y los lemas. La lógica, el sentido común, son infalibles: si no existen, si no son congruentes, sabremos qué esperar de los embustes de estos candidatos a representaciones populares y a gobernantes. Cotidianamente hay alarmantes indicios de la ineficacia de nuestros gobiernos de nuestros representantes populares, de nuestras autoridades de todos los niveles: vialidades descuidadas – baches al por mayor=calles quebradas, sin señalamientos, poblaciones enteras=regiones sin seguridad, desconfiadas, incrédulas, amiedadas, con temor y hasta espanto, la mayoría de los servicios públicos ineficientes e insuficientes, galopantes y escalofriantes corrupción e impunidad, quebrantado el Estado de Derecho, insatisfacción en la procuración y administración de la justicia, desplomada la gestión de gobierno, etc. El real problema es la respuesta a la pregunta: si así están los indicios, las visiones y las percepciones, ¿cómo estará allá adentro la estructura del gobierno, de la administración en sus tres niveles de gobierno? Espanta la verdadera, la real, la cercana y la más objetiva respuesta. Ahí está la realidad, y es terrible y debería ser la principal preocupación de nuestra sociedad, y de nuestros futuros gobernantes Es válido aceptar que habrá mexicanos esperanzados y optimistas, que creen en un mejor futuro, no ilusos. También, que a muchos mexicanos no les gustan el presente, no les gustan los indicadores de nuestra pobreza, los salarios, la inseguridad, la gobernabilidad, la justicia, la seguridad social, la imagen de la política, ni los gobiernos ni gobernantes, etc.: no les agrada nuestra realidad política, ni social, que no se cubren con las estadísticas, ni con un dedo. Como sociedad debemos saber el verdadero currículum vitae de los aspirantes: qué ocupación=profesión tienen, qué hicieron, a qué se dedican, de qué se mantuvieron en los últimos 5 años, cuál es su perfil y antecedentes económico, familiar, para deducir con qué intención y disposición aspira a llegar al poder representativo del pueblo. Nada de Declaración 3 de 3. Eso es un juego, una vacilada. La vox pópuli, la real, la conocida por el pueblo, la secreta, los rumores. Es útil y muy necesario. Como lo dice Vito Corleone: el saber, no ocupa lugar. Y así decidir y si nos equivocamos, tener=ejercer la facultad de rescindir=revocar el contrato social. Urge la Revocación de Mandato… ¡Y la Segunda Vuelta!