La Voz de Michoacán Tan necesario como el alumbrado público y otros servicios, la Internet se ha vuelto un derecho humano que, sin embargo, presenta en Michoacán un territorio ‘offline’. Menos del 50 por ciento de los hogares cuenta con una conexión, mientras que en general, sólo 60 por ciento de los habitantes tiene acceso a la gran red. Esto quiere decir que más de un millón de personas está “fuera de línea”, rezagada no sólo en cuanto temas de conectividad, sino en otros que van de la mano. En el plano educativo, la Internet se ha vuelto una gran fuente de consulta; en términos de información general, la pertinencia e inmediatez han vuelto a los sitios web serios de noticias como consultas obligadas para la ciudadanía. Ni se diga en lo recreativo. Incluso las autoridades dan una serie de avisos y anuncios por la vía digital, avisos que, como se nota, no llegan a casi la mitad de la población. Mejorar la infraestructura, llevar la conexión a los confines más alejados, a las comunidades marginadas debe ser una de las rutas prioritarias de trabajo de este Gobierno. No hay de otra.