Diciembre, otra vez

Invencible desde sus dulces cantos y sus mejores deseos, diciembre llega otra vez para llevarse como un ladrón la poca alegría que nos queda en este cementerio de pulmones sobrevivientes.

Gustavo Ogarrio

Yo tan sólo quería que diciembre, con sus cantos desalmados envueltos en sollozos idílicos, cerrara por dentro las heridas de todos los tiempos. Diciembre cegador desde su escaparate de luces en las plazas que nos dejaba sin nieve y sin malos pensamientos. Diciembre agrio que fusilaba infantes en esas fotos tomadas bajo las murallas de adornos navideños y de pastos artificiales. Diciembre: insaciable bestia de memorias fabricadas frente al bacalao y el espagueti. El olvido latía en sus costillas de heno, en sus árboles con esferas que hacían convivir a los peregrinos con los criminales.

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El resplandor de las piñatas en patios lúgubres, la caída épica de las mandarinas, las cañas y los dulces. Quise morir en diciembre cuando la soledad penetró en mis párpados y me dejó sin la lírica triunfal de los buenos deseos y el intercambio de regalos monstruosos.

Diciembre. La lenta emanación del tiempo en casas de techos opacos, horadando el recuerdo de montañas que estallaron de oscuridad en inviernos lejanos, carreteras frías que nos llevaron puntualmente a ningún lugar, infancias remotas que concluyeron ante las voces que salían de la radio; rumores de brazos caídos en el espejismo de las horas muertas. Diciembre.

Cenizas de tiempo que nos visitan atravesando el pelambre oscuro de los meses: octubre, noviembre, diciembre. Cartas escritas a mano que se desmigajan en su largo esperar de luces y sombras, con los dedos de papel que también se derrumban, ateridos de espera. Los tonos del tiempo se llenan de lugares en diciembre y algún dios menor deja de venerar a los peregrinos para tirarse al vacío de las copas y así rezumar su propio dolor.

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Invencible desde sus dulces cantos y sus mejores deseos, diciembre llega otra vez para llevarse como un ladrón la poca alegría que nos queda en este cementerio de pulmones sobrevivientes.