LA CASA DEL JABONERO | Félix Salgado, el feminista

No importaron las denuncias por acoso y abuso sexual, incluso contra una menor de edad: Morena eligió como candidato a Félix Salgado.

Jorge A. Amaral

No importaron las protestas en las calles, no importó que al interior de Morena muchas militantes hayan pedido que el partido rectificara el camino y retirara de la contienda por la gubernatura de Guerrero a Félix Salgado Macedonio. No importaron las denuncias por acoso y abuso sexual, incluso contra una menor de edad: el partido del presidente dejó ver esta semana que el expresidente municipal de Acapulco era el ganador de la encuesta para representar al partido guinda y que el sentir y derechos de las mujeres valen, como decimos en mi pueblo, purititita tiznada.

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Félix, dechado de virtudes

En la encuesta aparecieron los nombres del senador con licencia, acompañado de Adela Román, alcaldesa de Acapulco con licencia, la senadora y exautodefensa Nestora Salgado, la excandidata de Morena en Michoacán, María de la Luz Núñez, y Esther Gómez, operadora de Morena en Guerrero. En el ejercicio que dice Morena que hizo hasta parece chiste, pero Salgado Macedonio se sacó un 10. Veamos:

En el rubro “Opinión positiva”, es decir, cómo lo ven los morenistas guerrerenses, Esther Gómez sacó 1.1 por ciento, María de la Luz Núñez, 1.5; Adela Román, 3.6, Nestora Salgado, 4.4, y Salgado Macedonio, 15.8 por ciento, lo que le da un punto.

En el rubro “Buen candidato”, María de la Luz Núñez obtuvo el 2.6 por ciento; Esther Gómez, el 2.7; Nestora Salgado, 6.8; Adela Román, 6.0, y Félix Salgado Macedonio arrasó con el 27.6 por ciento, lo que le da otro punto.

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En cuanto a “Disposición para votar (sí)”, es decir, la gente que votaría por cada aspirante, María de la Luz Núñez obtuvo 2.0 por ciento; Esther Gómez, 2.2; Nestora Salgado, 5.7 por ciento; Adela Román, 6.0, y Salgado Macedonio, 25.4 por ciento, porcentaje que le da otro punto.

En el rubro “Preferencia como candidato o candidata de Morena”, María de la Luz Núñez Ramos obtuvo el 2.9 por ciento de la preferencia; Esther Gómez, 3.0; Nestora Salgado, 4.1; Adela Román, 6.4, y Félix Salgado Macedonio de nuevo se la lleva con 28.5 por ciento, que en este rubro le da 2 puntos, para un total, hasta ahora, de 5.

Pero no crea que Félix Salgado Macedonio no es aclamado por la feligresía morenista debido a su atractivo físico, su intachable carrera política, su brillante gestión como alcalde de Acapulco u otra gracia. No. Félix, el hombre, el ser humano, es un bello ejemplar de humano con encomiables atributos que ha valido la pena dejar para el final:

En “Honestidad”, Esther Gómez se queda muy lejos con apenas el 2.7 por ciento; María de la Luz Núñez sólo obtuvo 2.9; un poco más arriba está Nestora Salgado, con 7.4 por ciento; Adela Román supera los dos dígitos con 10.4, pero Félix Salgado Macedonio, demostrando la gran probidad de que goza, obtuvo 26.0 por ciento, y con ello obtiene otro punto.

Pero además de honesto, el senador con licencia es un hombre cercano a la gente, o al menos así ven los morenistas a Tata Félix, a decir del partido. En este atributo, la más lejana a la gente es María de la Luz Núñez, con 2.9 por ciento de percepción de cercanía; Esther Gómez obtuvo 4.3; Nestora Salgado, 8.2; Adela Román, 11.3 por ciento, y Félix Salgado, que de tan cercano hasta le dicen de cariño El Toro, arrasó con 32.3 por ciento, y esto le vale otro punto.

Además de honesto y cercano a la gente, El Toro es un político a ras de tierra, y por ello es el que conoce mejor los municipios, no como María de la Luz Núñez, que sólo sacó 3.4 por ciento en este atributo; como Esther Gómez, que apenas si sacó 3.7; en tanto que Nestora Salgado obtuvo 9.1 y Adela Román, 12.7 por ciento. Félix Salgado se las lleva de calle con 36.8 por ciento en esta percepción, y eso le da otro punto.

El senador con licencia es amigo del presidente, y es que López Obrador sabe escoger muy bien a sus amistades: deben ser honestos, cercanos a la gente y conocer la tierra que pisan. Pero también deben ser cumplidores, atributo en el que Salgado también salió mejor puntuado. Y es que Esther Gómez y María de la Luz Núñez salieron más bajitas, con 2.7 por ciento; Nestora Salgado obtuvo el 7.2 y Adela Román obtuvo 9.0 por ciento. Félix Salgado sacó 24.3 por ciento, y un punto más a su calificación.

Por si todo lo anterior no fuera suficiente para demostrar que, como dijo el presidente desde el púlpito matinal, las denuncias hacia Salgado Macedonio no obedecen más que a una guerra política, por si no ha quedado claro que las feministas han sido infiltradas por conservadores que quieren dañar al movimiento de la cuarta transformación, el siguiente punto los va a dejar helados, porque, aunque las demás personas en la encuesta son mujeres, con todo y que algunas llevan años luchando con un enfoque de género, nadie le gana a Salgado Macedonio, porque en el atributo de “Respeto a las mujeres”, el señalado en 5 denuncias por violación es el que, a ojos de los presuntos encuestados, es el que más respeta a las mujeres, y para demostrarlo está el 23.5 por ciento que obtuvo, frente a María de la Luz Núñez, con su minúsculo 3.6 por ciento; Esther Gómez, con 4.3; Nestora Salgado, con 10.8, o Adela Román, con 14.3 por ciento. Así, con su 23.5 por ciento obtiene el décimo punto de la calificación: 10.

El dictamen de la encuesta es contundente: “De acuerdo con el estudio realizado en el estado de Guerrero, Félix Salgado Macedonio obtiene 10 puntos en la estimación de diferencias que es integrada por la opinión positiva, los atributos de honestidad, cercanía, conocimiento de su municipio, credibilidad, el reconocimiento como buen candidato, así como por la disposición de voto y preferencia”, por lo que “es el mejor posicionado en el estado de Guerrero”.

Según la nota metodológica, se realizaron mil 388 entrevistas domiciliarias con un margen de error de +/- 2.7 por ciento y la selección de la muestra fue a partir de un “muestreo sistemático, aleatorio, estratificado, utilizando en primera prioridad la sección electoral considerando el peso de la lista nominal para cada sección y haciendo un barrido sistemático de todo el marco muestral”.

Pero, según lo informado por Milenio, Morena no detalló la realización de la encuesta, ni fechas ni participantes. Es más, Luis Walton y Nestora Salgado en ningún momento fueron notificados si sus nombres habían sido considerados en la reposición del ejercicio. Por su parte, Beatriz Mojica, quien estaba interesada en participar, no fue contemplada por la Comisión de Encuestas, pero sí se incluyó a dos mujeres cercanas al presidente López Obrador: María de la Luz Núñez, quien ya fue alcaldesa de Atoyac, y Esther Gómez, responsable del plan de organización de Morena en Guerrero.

¿Es de fiar la encuesta?

Los resultados de esta encuesta nos hacen preguntarnos quiénes serán esas más de mil personas a las que se les preguntó, y si realmente existen, qué tan cercanos son a la cúpula estatal morenista, porque si algo ha faltado en este tema es la transparencia para saber de dónde sacaron la información, si fue con militantes de a pie o con allegados, o si fue al estilo perredista, entre compadres.

Y es que despierta sospechas el hecho de que el responsable de coordinar este ejercicio sea, a decir de informes filtrados a medios nacionales, Carlos Emiliano Calderón, quien funge como coordinador de Estrategia Digital Nacional en la Presidencia de la República.

Pero si esto es verdad, viene otra pregunta: ¿por qué alguien que trabaja para el Estado organiza una encuesta interna en un partido político, así sea el suyo? ¿Indicación presidencial? Vaya usted a saber, porque en el país de los otros datos todo se presta a la simulación y la opacidad con tal de contener el golpeteo mediático.

Y es que resulta sospechoso que Salgado Macedonio sea más respetuoso de las mujeres que las mismas mujeres, con todo y las 5 acusaciones de abuso sexual en su contra. Además de ello está lo que ya hemos comentado: la cercanía de Salgado Macedonio con López Obrador y Ricardo Monreal, el alfil del presidente en el Senado.

Con esta decisión y la tibieza con que su partido ha actuado deja mucho que desear, porque el partido del autoproclamado “presidente más feminista” avala la postulación de un sujeto acusado de delitos graves, como el de violación, pero también con un historial de servidumbre al narco, así que no es precisamente el mejor toro que Morena pudo haber soltado al ruedo.

Exceso de confianza

Esa decisión, porque no fue una encuesta, fue una determinación desde lo más alto del poder, refleja el exceso de confianza del partido del presidente, que seguramente piensan que pueden ponerle a la gente a cualquier cretino y aun así ganarán las elecciones. Por ello, las elecciones del 6 de junio serán clave, pues nos servirán como muestra de lo que le espera al presidente y su partido en 2024, porque los morenistas, por mucho amor que le tengan a su líder, deben saber que con los no alienados que votaron por él por considerarlo el mejor perfil, la luna de miel ya terminó desde los primeros meses de su mandato, y eso se paga, y muy caro, en las urnas.

El 6 de junio Morena podría sufrir un revés en Guerrero con ese candidato, o en otros lugares donde se haga evidente la falta de estrategia federal en distintos rubros, y eso, rumbo a 2024, pinta un panorama que no es nada alentador, porque el romanticismo del cambio que se da cada 6 años ya pasó, y entre la polarización y los magros resultados la factura puede ser alta.

A Morena no le bastará con los feligreses, los alienados que son incondicionales al partido, sino que se requiere el voto de los indecisos, esos que siempre votan por perfiles, no por partidos; los que no están casados con movimientos, y a esos el presidente los está perdiendo. A menos, claro está, que la oposición siga tan desdibujada como ahora.

Como sea, Salgado Macedonio ya es candidato, y por la forma en que se han hecho las cosas, y por la manera en que actúan los seguidores del presidente, de atacar a los detractores y hasta acusar de traición a quienes contravienen los mandamientos políticos de la 4T, Morena deja claro que no es más que un partido de Estado, como en su momento fue el PRI, y que López Obrador cada vez actúa más como un dictadorzuelo de república bananera, con la diferencia de que ya no usa rifles para fusilar a los disidentes, ahora el linchamiento es mediático y digital.

Ahora a Morena sólo le resta esperar los resultados en las urnas el 6 de junio y en 2024 para pagar la factura de sus errores, fanatismo y necedad. Es cuánto.