Luis Sigfrido Gómez Campos El 25 de noviembre de 1960, las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal fueron detenidas y asesinadas por esbirros del dictador Rafael Leónidas Trujillo en la República Dominicana. Regresaban a casa después de visitar a sus parejas en la cárcel de Puerto Plata. En el año de 1981 se realizó el primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe en Bogotá, Colombia. Allí se propuso establecer el 25 de noviembre como el Día de Lucha Contra La Violencia Hacia las Mujeres. A partir de 1999, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) determinó extender esta conmemoración a nivel global, debido al alto índice de mujeres violentadas en el mundo. En el México, el señor Vicente Fox, a las 8:51 horas de este mismo sábado 25 de noviembre, fecha en que se conmemora la Lucha Contra La Violencia Hacia las Mujeres, subió un breve mensaje en las redes sociales en el que alude a Mariana Rodríguez, esposa de Samuel García, precandidato a la presidencia de la república, llamándola “esa dama de compañía”. La señora Mariana Rodríguez Respondió de manera inmediata el mensaje. Le dijo al expresidente, entre otras cosas: “Señor, no soy una dama de compañía… ni puede faltarnos al respeto, y menos de esa forma ten vulgar”. Fox, ni tardo ni perezoso, respondió en un mensaje con erratas y faltas de ortografía que él no era ningún machín y que a las pruebas se remitía; se dijo víctima de los Influencer que le quitan objetividad a sus palabras y pidió disculpas al “ofendido verdadero”; él sí sabe de lo que se trata, quiso decir en un lenguaje confuso. Seguramente piensa Fox que esto es cosa de hombres. Y le echó más candela. Fox agregó: “Hay quienes pretenden convertir el debate electoral en debate de género. Qué equivocación si nos amamos y nos respetamos”. Pobre Vicente, no entiende nada de nada, no comprende que el mundo ya cambió y que no puede andar abriendo la boca a lo tonto sin que sus palabras tengan consecuencias. Pero no todo paró ahí. Además de que Mariana Rodríguez lo acusó de violencia de género, Xóchitl Gálvez, candidata del Frente Opositor, hizo declaraciones emergentes para tratar de deslindarse de Vicente Fox, le dijo en su portal de X: “Si atacan a una nos atacan a todas. Mi lucha es contra la violencia hacia las mujeres, venga de quien venga, vaya contra quien vaya. Rechazo y condeno totalmente las afirmaciones de Vicente Fox contra Mariana Rodríguez”. Vicente tuvo la oportunidad de quedarse callado para no decir más sandeces; pero no pudo, al parecer tiene un trastorno de incontinencia verborreica. Otra vez se le hacía tarde para decirle a Xóchitl, en un párrafo pequeño plagado de faltas de ortografía, que “¡Ah! Cómo les ha echado crema a sus tacos”; y se pregunta inocentemente a qué se refiere la precandidata cuando dice: “si atacan a una nos atacan a todas”. Es tan limitado que no entiende que se trata de una frase que prácticamente se ha convertido en consigna universal de solidaridad entre las mujeres que suelen luchar por la defensa de sus derechos y en contra de la violencia de género. En México, según cifras de la ONU, unas diez mujeres son asesinadas al día, y, asimismo, siete de cada diez han experimentado al menos una situación de violencia. A nivel mundial, en promedio, cinco mujeres o niñas son asesinadas cada hora por alguien de su familia. “Alrededor de 31% de mujeres entre 15 y 49 años, o hasta 852 millones de mujeres, han experimentado violencia física o sexual, según un estudio de la OMS recabando datos internacionales y sondeos tomados entre 2000 y 2018”, publicado en el portal de Aristegui Noticias, mismo que aclara que es muy probable que estas cifras sean mucho mayores, debido a que los abusos sexuales, muchas veces, no llegan a la denuncia por el estigma que suelen cargar las mujeres violentadas por este tipo de delitos. La pretensión de Xóchitl de deslindarse de las declaraciones machistas de su exjefe resulta de vital importancia en estos momentos de su vida política. No puede cargar con el desprestigio de un vejete decrépito que cree que sus declaraciones pueden contribuir a la causa de la candidata del Frente Opositor, cuando son un lastre de descrédito. En julio pasado hizo una declaración por el mismo tenor: “Ojalá y Xóchitl nos cubra eso de que los huevones no caben en el gobierno y tampoco en el país. Ya se acabó que estén recibiendo programas sociales. A trabajar, cabrones, como dice Xóchitl”. Menudo favor le hace a la precandidata opositora. “Con ese tipo de amigos, para qué quiere enemigos”, suele decir el refrán popular. Por otra parte, mal hace Fox en tratar de demeritar de manera grosera al imberbe mozalbete regiomontano que, con esos habladitos de “pirrurris”, pretende tocar el corazón de las masas. Yo me pregunto: ¿Vicente Fox es tonto o se hace al pretender ignorar que existen los eufemismos para no llamar a las cosas por su nombre cuando las cosas resultan demasiado groseras? En la actualidad se usan los términos: escort, acompañante, prepago y, por supuesto, dama de compañía, en lugar de utilizar la vulgar expresión: prostituta. Estos términos, lingüísticamente se llaman eufemismos. Hay quien se entretiene en buscar pequeñas diferencias en el uso de cada uno de estos vocablos, pero en el fondo se refieren a lo mismo. Así es que no finja demencia señor Fox; lo que le dijo a la esposa del candidato regio es muy, pero muy grave. Y sí, es usted un machista redomado y a las pruebas me remito. luissigfrido@hotmail.com