Agencias / La Voz de Michoacán. El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ), Felipe de Jesús Álvarez Cibrián, informó que se abrió una línea de investigación por caso de menor que murió supuestamente víctima de bullying. En entrevista, en el marco del Foro Municipal de Atención a Pandillas, organizado por el ayuntamiento de Zapopan, explicó que se abrió la queja cuando se tuvo conocimiento, "nos notificó la oficina regional de Lagos de Moreno, y estamos integrando una serie de investigaciones". Añadió que enviaron a las autoridades de Educación la petición de oficios para que rindan un informe justificado de los hechos y poder dar trámite a este caso como corresponde, de acuerdo con lo que marca la propia Ley de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. Respecto a las quejas contra bullying, aclaró que es un tema en el que "es muy poco probable que la Comisión se pueda pronunciar como violación de derechos humanos, porque se da una violación entre particulares". Añadió que lo que hace la CEDHJ son quejas por la acción de servidores públicos estatales o municipales, como es el caso en mención que se abre no por la agresión directa sino por la probable omisión por parte de maestros y directivos de la escuela de no haber prevenido si es que tuvieron conocimiento. "Esa es concretamente nuestra línea de investigación para advertir si hubo o no la violación del derecho humano de parte de servidores públicos", reiteró Álvarez Cibrián y dijo que se investiga el hecho de si las autoridades educativas incurrieron en una violación. Añadió que esta situación no es tanto problema de leyes sino de que las autoridades, los servidores públicos tienen que estar concientes de sus responsabilidades. "Como consecuencia tienen que cumplir con todo lo que corresponde a la protección de los derechos de las niñas y los niños, en lo que corresponde a las escuelas", apuntó. Con respecto a los agresores, señaló que ellos son víctimas de las circunstancias, del abandono y muchas veces de la violencia familiar y social que ellos mismo viven, por lo que son niñas y niños que tienen que ser también protegidos por el Estado. El caso corresponde a un niño que falleció por bullying en Lagos de Moreno, Jalisco.